La directora de Convoca.pe, Milagros Salazar, viajó hasta la provincia de Espinar, en Cusco, para presentar nuestra historieta periodística ‘Angustias de una familia con arsénico’ en el I Congreso Provincial de la Plataforma de Afectados por Metales Tóxicos Espinar. El proyecto tiene como objetivo informar y sensibilizar acerca de esta problemática de salud pública, pues en el país alrededor de 10 millones de peruanos están expuestos al riesgo de contaminación. Este año el Gobierno aumentó el presupuesto público para tratar a los afectados, pero la atención médica sigue sin llegar.

 

 

Convoca.pe viajó el último fin de semana a la provincia de Espinar, en Cusco, una de las zonas del Perú más contaminadas por la industria minera, para presentar ante la población el cómic periodístico ‘Angustias de una familia con arsénico’, de nuestro especial “Expediente Tóxico”. La exposición estuvo a cargo de la directora de este medio, Milagros Salazar, en el contexto del I Congreso Provincial de la Plataforma de Afectados por Metales Tóxicos Espinar-Cusco, desarrollado el domingo 10 de julio, que buscó fortalecer y hacer seguimiento a los proyectos que se impulsan desde la plataforma provincial.

En el evento estuvieron presentes comunidades, organizaciones sociales de base, autoridades distritales y provinciales de Espinar, y dirigentes de la provincia de Chumbivilcas. 

“El cómic está hecho para informar, difundir y sensibilizar a nivel nacional sobre esta problemática”, señaló Salazar. La contaminación por metales pesados es un tema al que Convoca.pe ha prestado especial atención en los últimos años, ya que al menos 10 millones de peruanos están expuestos a la contaminación, sobre todo en Cusco, Puno, Loreto, Junín y Pasco. Los 54 mil residentes de Espinar están entre aquellos que corren el mayor riesgo.

La historieta narra la historia de los Kana Quispe, una familia de dicha provincia cusqueña que vive frente al depósito de relaves Huinipampa, del proyecto minero Antapaccay, operado por la multinacional suiza Glencore. Entre 2010 y 2017, el Estado tomó pruebas entre los habitantes para detectar la presencia de metales pesados en su organismo. Las muestras de Ceferino Kana, su esposa y sus dos hijos revelaron que los tóxicos en sus cuerpos sobrepasaban los límites permitidos para arsénico, plomo, cadmio y estronio. Con la pandemia de la Covid-19, su situación de salud se agravó. 

 

Milagros Salazar
Durante la presentación del cómic, Salazar también recordó a las comunidades que a través de la plataforma Expediente Tóxico, creada por este medio digital, pueden consultar los presupuestos que invierte el Gobierno para atender a personas expuestas a metales pesados. Foto: Plataforma Nacional de Afectados por Metales Pesados. 

El mes pasado este medio digital publicó un reportaje sobre el primer presupuesto que dispuso el gobierno central para la atención de estas poblaciones, que supera los 10 millones de soles. Entre la lista de departamentos beneficiados con la ejecución de este plan de presupuesto, Cusco es la región con más dinero asignado. Tiene más de 2,5 millones de soles para invertir solo en la provincia de Espinar, lugar donde vive la familia Kana Quispe.

Sin embargo, Convoca.pe ha confirmado que donde opera la compañía minera Antapaccay, de la multinacional suiza, hasta el 15 de junio de este año solo se había ejecutado el 3% del monto total, según el Portal de Transparencia Económica del Ministerio de Economía y Finanzas.

“El dinero está. Lo que es importante es que este dinero se pueda ejecutar de una manera eficaz y que las personas puedan ejercer la misión de vigilancia pública en alertar al periodismo cuando no son atendidos y el presupuesto no es ejecutado de manera correcta”, resaltó la directora de Convoca en su presentación. 

Por su lado, Ceferino Kana, quien hasta el momento no recibe tratamiento médico ni su familia, consideró que es fundamental continuar reforzando la difusión de la información a través de este tipo de formatos sobre lo que viene ocurriendo en Espinar, respecto a los impactos negativos de la actividad extractiva. 

Hasta ahorita no hemos recibido atención. Nos preocupa mucho. Acá lo importante de este trabajo es que otros departamentos van a poder conocer nuestra realidad y así ver cómo nos podemos unir con otras regiones para crear más proyectos donde difundamos esta información”, opinó Kana. 

La publicación ‘Angustias de una familia con arsénico’ representa la realidad de las familias de tres comunidades campesinas en Espinar. En la actualidad, la comunidad exige pruebas para las 54 mil personas que habitan la provincia, pues consideran que todas se encuentran en riesgo. El Gobierno Regional argumenta que no tiene presupuesto suficiente. 

 

Cómic

 

La expremier Mirtha Vásquez también estuvo presente en el I Congreso Provincial de la Plataforma de Afectados y comentó el trabajo de Convoca. La abogada hizo hincapié acerca de impulsar la modificación de una norma que permita identificar la cantidad de personas antes de iniciar una operación minera, a fin de establecer medidas de protección en beneficio de la salud, la vida y el medio ambiente. 

La actividad minera en Espinar comenzó hace más de 40 años. Hace cinco años se emitió una sentencia del Poder Judicial que ordenó brindar atención especializada a las personas en riesgo por la contaminación que ha producido la actividad extractiva. Entre las medidas, también se recomendó hacer una vigilancia epidemiológica, ambiental y sanitaria, que incluya el monitoreo constante de los estándares de salubridad del agua.

Pese a que la Gerencia Regional de Salud (Geresa) de Cusco ofreció cumplir el fallo judicial en diciembre de 2020, con un plan de acción, en mayo de 2015, la comunidad campesina Huisa y tres organizaciones sociales interpusieron una demanda contra el Ministerio de Salud y otras instituciones del Estado, debido a que este plan no cumplía con sus necesidades. 

Si quieres leer el cómic ‘Angustias de una familia con arsénico’ y conocer más sobre los riesgos a los que hacen frente las comunidades de Espinar, haz clic aquí. Mientras tanto, los espinarenses continúan a la espera de que el gobierno de turno ponga atención sobre los obstáculos que generan retrasos para su atención médica.