La semana pasada las empresas concesionarias del Sistema Integrado de Transportes (SIT) amenazaron al municipio provincial de Arequipa y a los ciudadanos mistianos con suspender el servicio si no les permitían subir el pasaje hasta S/ 1.50. Su principal argumento es el incremento del precio de los combustibles, pero no no cuentan con informes financieros que respalden sus pretensiones. Por este motivo por el cual la comuna rechazó el pedido. Sin embargo, si los operadores de transporte subsanan las observaciones, la propuesta podría volver a ser revisada.

Uno de los principales reclamos de los usuarios es que los transportistas no brindan un buen servicio, pues sus unidades no cubren todas las rutas establecidas —sobre todo en los pueblos jóvenes—, no cumplen los horarios, van repletas y con pasajeros colgados de las puertas, no renuevan los vehículos, siguen transitando con custers viejas (a pesar de que el sistema requiere de buses modernos) y son constantes protagonistas de accidentes que terminan, incluso, con la muerte de personas.

Una evidencia del mal servicio son las 12.594 sanciones que la Municipalidad Provincial de Arequipa les ha impuesto en los últimos cuatro años. Solo este año, as unidades del SIT provocaron 12 accidentes con dos personas fallecidas, indicó a Convoca.pe el subgerente de Transporte Público y Especial, Juan Carlos Callacondo.

Ultimátum sin sustento

En 2021, lel municipio arequipeño impuso casi 9 mil sanciones, tanto a buses formales como informales. Este año fueron 1.480, informó el subgerente Juan Carlos Callacondo. Las multas varían desde el 30% de la Unidad Impositiva Tributaria (UIT) hasta 1 UITs o 4.600 soles, que es la máxima sanción que se les puede imponer.

Las principales causas de las sanciones a los buses formales fueron las malas prácticas en el servicio, como retraso en sus horarios, no contar con GPS o falta de documentos de los conductores, como licencias, seguros y revisiones técnicas, y por accidentes de tránsito. Los vehículos informales fueron intervenidos por los mismos motivos y sus vehículos llevados al depósito municipal.

Para Callacondo resulta contradictorio que los empresarios de transporte pidan el incremento de pasajes, pero no mejoren su oferta. “La principal queja es que no cubren todas las rutas ni los horarios —algunos dejan de operar a las 7 de la noche cuando el contrato indica a las 9—, llevan a los pasajeros apretados como sardinas, se corretean entre ellos, produciendo accidentes e, incluso, permiten el ingreso de vehículos piratas que hacen servicio con su venia”, explica.

Las diez empresas concesionarias del SIT tienen registradas 2800 unidades, de las cuales solo 1300 cumplen  todos los requisitos para operar, otras mil están en proceso de acreditación y 500 no cumplen ninguna de las conidiciones y se desplazan como informales, aunque con los logos del SIT y el respaldo de dichas empresas.

A pesar de estas deficiencias, los transportistas piden el aumento del pasaje; de S/ 1.00 a S/ 1.50. Su principal argumento es el alza del precio de los combustibles, aunque desde enero de este año el costo ya bordeaba los 20 soles por galón y en agosto rozó los 25 soles.

La Junta de Operadores —que agrupa a todas las empresas— envió su requerimiento para el alza de tarifas a la comuna provincial el mes pasado. De acuerdo con la norma, el municipio tenía15 días hábiles para responder. Este plazo culmina el 5 de noviembre, pero la comuna respondió antes.

El municipio rechazó el incremento de los pasajes sobre la base de cinco observaciones al pedido de los transportistas. “Primero, invocan las cláusulas 58 y 60 del contrato para la modificación de las tarifas, pero estas solo pueden aplicarse en la etapa de operatividad. De igual forma, pasa con la cláusula 71. Estos artículos señalan que las empresas deben presentar los estados financieros auditados de sus ganancias y pérdidas, para sustentar que están en negativo. En este caso no lo han presentado", explicó Juan Carlos Callacondo, subgerente de la comuna.

Además, si  los operadores de transporte quieren aumentar la tarifa de pasaje también deben mejorar el servicio. Sin embargo, el funcionario edil destacó los informes sobre las infracciones, como el incumplimiento de los horarios o la falta de frecuencia, la ampliación de horarios de noche, el retiro de los letreros en los parabrisas, el no usolos megáfonos y la uniformización de los choferes. "Todo eso forma parte del contrato y no lo cumplen”, advirtió.

Estas observaciones son subsanables, según Callacondo. El viernes pasado, los funcionarios ediles y el alcalde provincial de Arequipa, Omar Candia, se reunieron con los transportistas y les explicaron que no podían suspender el servicio porque se arriesgaban a perder sus contratos. Al final de la reunión, el acuerdo fue no paralizar sus labores, pero seguir insistiendo con el alza de los pasajes.

Los operadores de transporte elaborarán otro informe levantando las observaciones y volverán a presentar el requerimiento. El subgerente de Transporte Público y Especial señaló que una opción es solicitar un subsidio al gobierno central, como lo hace el sistema de transporte público en Lima. 

Las empresas del SIT en Arequipa brindan el servicio con vehículos antiguos que debieron renovar este año. Foto: Roberth Orihuela

El Sistema de Transporte Público de Arequipa

El SIT como idea nació en la primera década de este siglo. El exalcalde provincial Simón Balbuena Marroquín lo planteó como una solución al caos del transporte público en Arequipa y dejó el proyecto encaminado como Mistibus. En la gestión de Alfredo Zegarra Tejada (entre el 2010 y 2018), el SIT dio los pasos más importantes. Se plantearon diez rutas alimentadoras y dos troncales, que fueron licitadas bajo la modalidad de Asociaciones Público Privadas (APP).

El expediente señalaba que las empresas que operaban antes de la licitación podrían asociarse con el fin de crear una sola compañía y que debían buscar el apalancamiento financiero con otra empresa experimentada del extranjero o del país. “Sin embargo, al momento de la licitación, este último requisito se obvió y las empresas que ganaron no pudieron demostrar experiencia. Por ese motivo, el SIT no ha cambiado mucho con respecto a lo que teníamos antes”, añade el subgerente de Transporte Público y Especial, Juan Carlos Callacondo.

La Contraloría General de la República emitió el Informe de Auditoría Nº 5661-2021, sobre el proceso de licitación de las rutas del SIT. La principal observación fue que los contratos se redactaron sobre la base de una norma derogada de las Asociaciones Público Privadas. Debieron tomar en cuenta los Decretos Legislativos 1012 y  1224 de Asociaciones Público Privadas, pero usaron otros derogados en 2009.

Además, el sistema no tomó en cuenta algunas zonas alejadas de la provincia, que quedaron sin servicio.  El informe concluye responsabilizando penal y administrativamente a 14 funcionarios de las gestiones ediles, entre el 2008 y el 2018.

El SIT Arequipa tiene diez rutas abastecedoras y dos troncales que buscan resolver el problema del transporte en la ciudad mistiana. Ilustración: Municipalidad de Arequipa

Con la firma de los contratos, las empresas concesionarias se comprometían a adquirir unidades nuevas para mejorar la oferta del servicio a los ciudadanos cubriendo todas las rutas del SIT. Para ello, se dio un plazo de dos años, contados desde la firma de todos los contratos. A esta etapa se le denomina como preoperatividad. Pasado ese tiempo, empezaría la etapa de operación. 

Sin embargo, el último contrato del SIT se firmó en octubre de 2019, por lo que legalmente los transportistas tenían como último plazo para registrar sus nuevas unidades en octubre del año pasado. Pero la gestión del alcalde Omar Candia prorrogó la preoperatividad, con el pretexto de la pandemia del Covid-19. Por este motivo, la etapa de operatividad debía comenzar el 30 de octubre.

Todo parece indicar que el plazo volverá a prorrogarse, dejando la responsabilidad de implementar esta fase a la nueva gestión municipal. Esto porque la comuna tampoco ha cumplido con implementar el componente tecnológico, que es básicamente el sistema de recaudo mediante tarjetas electrónicas, y todas las rutas y paraderos necesarios para el servicio.

El alcalde electo Víctor Hugo Rivera adelantó que revisará el contrato del SIT, junto a los transportistas, con el fin de llegar a un acuerdo. Para el nuevo burgomaestre, una opción también es el subsidio del gobierno nacional. Además, se comprometió a continuar con la implementación de los componentes que son obligación de la comuna provincial, como los paraderos, la mejora de las vías y el sistema de recaudación electrónico.