Más de 228 mil soles se ha propuesto como monto de multa contra la Refinería La Pampilla, propiedad de la petrolera española Repsol, por la desnaturalización de los contratos de 97 trabajadores. En un expediente sancionador abierto por la Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil) en abril de 2023, se indica que la compañía ha incurrido en presuntas faltas graves a las normas que regulan el trabajo temporal. Esto haría que los contratos a tiempo determinado de los trabajadores involucrados se consideren como de tiempo indefinido. 

El expediente se originó luego de una inspección realizada por la Intendencia Regional del Callao de la Sunafil, en febrero último, a solicitud del Sindicato Único de Trabajadores de la Refinería La Pampilla (Sutrelapa). Este grupo denunció que la compañía estaba incurriendo en "desnaturalización de la contratación temporal mediante el uso fraudulento de modalidades contractuales". 

El 31 de mayo, los trabajadores de La Pampilla protestaron frente a la sede de Repsol en el distrito limeño de San Isidro. Foto: Convoca.pe

El sindicato alertaba que la empresa empleaba a decenas de trabajadores en la modalidad contratos a plazo fijo o temporales cuando en realidad los empleados realizaban actividades de carácter permanente. De acuerdo con las normas, los contratos temporales solo son aplicables en circunstancias muy puntuales, excepcionales, que tienen que ver con una modificación de las actividades de la empresa que demandan mayores trabajadores transitorios. Al negar la existencia de estas circunstancias, el sindicato alega que los contratos estaban "desnaturalizados" —es decir, que no se ajustaban con la realidad— y, por tanto, tendrían que reconocerse como de tiempo indefinido, como señala la ley.

Eso fue lo mismo que constató el fiscalizador de Sunafil, Miguel Paredes Portales, en su visita de inspección. De los trabajadores cuyas relaciones laborales se consideraban presuntamente “desnaturalizadas”, verificó que 31 habían sido empleados de manera temporal por la causal legal de “incremento de actividades”. Otros 57, por la emergencia surgida por el conocido derrame de petróleo en Ventanilla, de enero de 2022. Y un pequeño grupo de nueve se incorporó a raíz de la emergencia sanitaria del Covid-19.

Desnaturalizados

A partir de la inspección realizada en febrero, el funcionario de Sunafil detectó que los trabajadores contratados por el supuesto “incremento de actividades” en realidad ejecutaban labores permanentes en las áreas operativa y de producción de hidrocarburos. 

Como se sabe, la causal de “incremento de actividades” solo es aplicable cuando surge una necesidad temporal que exija un repentino aumento de contrataciones basadas en criterios objetivos. Al no encontrar estos indicadores, Paredes Portales dedujo los puestos de trabajo eran, más bien, “ordinarios, permanentes y continuos".

En el acta de infracción a la que tuvo acceso Convoca.pe se indica que Repsol no explicó "la correlación entre el incremento de actividades empresariales" y estas nuevas contrataciones temporales, así como tampoco precisó "los puestos de trabajo de carácter temporal nuevos”. El acta de Paredes concluye que esta fue la “razón por la que se determina que los referidos contratos se han desnaturalizado, debiéndose considerar como contratos de trabajo de duración indeterminada".

La inspección de la Sunafil Callao también detectó que los 57 trabajadores contratados por las actividades surgidas del derrame de petróleo de Ventanilla estaban ahora realizando actividades ajenas a esa emergencia. Como a los otros, también se les encontró laborando en las áreas de producción y operación.

La entidad fiscalizadora indicó que, en este caso, Repsol tampoco explicó de forma clara y lógica la correlación de las actividades que realizaban estos empleados con la mitigación, supervisión o protocolos del desastre que afectó el litoral peruano de Lima hasta Huacho. El inspector también dedujo que, por ello, estos empleos también resultaban ser “ordinarios, permanentes y continuos”.

Según el acta de infracción, 57 trabajadores contratados por Repsol por las actividades surgidas del derrame de petróleo de Ventanilla tienen contratos desnaturalizados. 

Y lo mismo ocurrió en el caso de los trabajadores que ingresaron a la compañía por la emergencia sanitaria del coronavirus, cuya declaratoria oficial duró de marzo de 2020 hasta febrero de 2023.

La explicación de Repsol fue que "la pandemia y sus consecuencias originó que un número importante de sus trabajadores que pertenecen al grupo de riesgo permanezcan en su domicilio con licencias con goce de haber”. Por ello, contrataron personal temporal para las labores en la Refinería La Pampilla.

Sin embargo, la inspección de Sunafil Callao detectó que la modalidad de contrato a plazo fijo no era la más adecuada para requerir nuevos empleados. La modalidad correcta, según el acta de infracción, debió ser el contrato de suplencia para que el empleador reserve el puesto a su titular, que es del trabajador con riesgo de comorbilidad por el Covid-19.

Otros nueve trabajadores tienen una modalidad incorrecta de trabajo, según la inspección de Sunafil.

Por ello, la inspección concluye que se trataría de una contratación "antitécnica e inexistente" en relación con las normas peruanas. Y, en este sentido, los contratos también estarían desnaturalizados.

Además, el funcionario Miguel Paredes apuntó que la empresa, durante la inspección, no entregó la documentación solicitada por Sunafil sobre la modalidad de trabajo de los 97 empleados identificados durante la inspección. En el acta, propuso que se aplique la subsidiaria de Repsol una sanción de 228 mil 888 soles.

El acta de inspección propone que Sunafil sancione a la Refinería La Pampilla S.A. con más de 46 unidades impositivas tributarias.

Habla una de las afectadas

Convoca.pe pudo conversar con la extrabajadora Érika Girón Champi, quien se desempeñó como operadora de campo de la Refinería La Pampilla hasta el 31 de marzo de 2023. Ella fue una de los 57 trabajadores temporales incorporados a raíz del derrame de petróleo y que denuncian que les correspondían contratos indefinidos. 

Girón, quien es profesional técnica de procesos químicos y metalúrgicos del Instituto Tecsup, inició labores en enero de 2022, apenas producida la catástrofe ambiental en el mar de Ventanilla.

Érika Girón es una de los 57 trabajadores que Repsol contrató para atender la emergencia del derrame de petróleo, pero que en realidad era enviada a realizar labores operativas en la refinería. Foto: Convoca.pe

Pese a que su contrato estaba vinculado a las labores para mitigar los efectos del derrame de petróleo, en realidad su trabajo era de producción en el área de destilación de la Refinería La Pampilla. “Pero mi trabajo no era en las zonas de derrame sino totalmente al interior de la refinería, en producción”, dijo.

La extrabajadora dijo a Convoca.pe que Repsol le ofreció el mismo tipo de contrato por la modalidad de emergencia. Pero para ella, esta “no tenía ningún sentido”, ya que la inspección de Sunafil ya había encontrado que la empresa había desnaturalizado el acuerdo firmado. 

Según Girón, se negó a firmar y por eso la empresa tomó la decisión de despedirla. Con el apoyo del sindicato de trabajadores, ahora exige su reposición en el puesto que desempeñó en la realidad, en el área de refinación, y que se respeten sus derechos laborales con un contrato de plazo indeterminado. 

La Refinería La Pampilla registra nueve sanciones de Sunafil por 19 infracciones a las normas laborales. Foto: Difusión.

Impactos negativos en los derechos laborales

Convoca.pe conversó con el abogado experto en industrias extractivas Henry Carhuatocto, del Instituto de Defensa Legal del Ambiente y del Desarrollo Sostenible, quien explicó que este tipo de infracción laboral afecta el derecho a la sindicalización, así como a la protección ante los despidos arbitrarios. Lo que suele ocurrir con los contratos desnaturalizados, explica, es que los empleadores renuevan los contratos de los trabajadores "temporales" que en realidad hacen labores permanentes.

Pero en caso de que los quieran despedir, la empresa ni siquiera tiene que hacerlo formalmente ni incurrir en los gastos que eso implica. Simplemente deja vencer el plazo y así camufla un despido arbitrario. "De alguna manera, cuando el empleado cree que es temporal y en realidad hace actividades permanentes, la empresa legitima de manera fraudulenta el despido mediante una no renovación", precisa.

El especialista también recordó un antecedente del Tribunal Constitucional que determinó en el 2016 que la compañía Repsol YPF Comercial del Perú SA desnaturalizó la relación laboral que tenía con su trabajador Luis Alberto Cardoza Jiménez. 

Cardoza era un chofer de camiones de la empresa Servosa Gas SAC, una subcontratista de Repsol. Sin embargo, el Tribunal determinó que en la práctica realizaba labores de naturaleza permanente y bajo entera subordinación del personal de la compañía de capitales españoles. Así, se ordenó a Repsol la incorporación del chofer como trabajador a plazo indeterminado en su planilla.

Registra infracciones laborales

De acuerdo con información de Convoca Deep Data, todas las empresas del grupo Repsol en Perú acumularon un total de 21 resoluciones de sanción por infracciones a la legislación laboral detectadas por la Sunafil entre 2015 y 2022. Todas estas disposiciones superan los 4 millones 664 mil soles en penalización. 

Solo las sanciones de Refinería La Pampilla SA suman 9, que se impusieron por haberse confirmado 19 infracciones a las normas laborales. La mayoría de estas infracciones están relacionadas al incumplimiento de condiciones y gestión de seguridad y salud en lugares de trabajo y a la obstrucción a la labor inspectiva. Las multas impuestas a La Pampilla suman un total de 2 millones 530 mil 486 soles.

Este medio se comunicó con Repsol para conocer la versión de la empresa. Al cierre de esta edición, indicó que aún estaba preparando sus respuestas a las consultas hechas por el proceso sancionador iniciado por Sunafil.

Este informe se actualizó el miércoles 7 de junio de 2023 para incluir las declaraciones del abogado Henry Carhuatocto.