Por Fiorella Montaño | 11 de abril de 2021
Arequipa.- Al promediar las 8 de la mañana, José Orjeda, un hombre de más de 60 años, llegó del brazo de su nieto al colegio Fortunata Gutierrez de Bernedo, ubicado en el centro de Arequipa, pero tuvo que esperar casi tres horas para ejercer su derecho al sufragio. Al igual que él, decenas de ancianos esperaron: algunos de pie y otros en las bancas que se acondicionaron en el patio del colegio hasta que se instalaron las mesas de votación.
Pero el esfuerzo que hicieron más de mil adultos mayores para votar en este colegio, puede venirse abajo, ya que todos los votos de este local podrían ser impugnados.
El colegio Fortunata Gutierrez de Bernedo tiene una particular composición de electores: todos son adultos mayores, por lo que los miembros de mesa sorteados también pertenecían a este grupo etario: cerca de 1200 personas consideradas vulnerables ante el COVID-19.
¿Qué es lo que sucedió? La mayoría de miembros titulares y suplentes, todos ellos adultos mayores, no acudieron al local de votación. Para instalar las cuatro mesas en el colegio Fortunata Gutierrez, en donde estaba programado el sufragio de 300 personas en cada una, los representantes de la Oficina Descentralizada de Procesos Electorales (ODPE) Arequipa 1, recurrieron a jóvenes voluntarios de locales cercanos, tal como informó a Convoca.pe, el jefe de este organismo, Marco Antonio Vilela. Esta medida transgrede la norma electoral.
Según la Ley Orgánica de Elecciones, los únicos que podrían reemplazar a titulares o suplentes de una mesa de votación son voluntarios del mismo local, no se contempla incluir a electores de otros centros de sufragio.
Iván Lanegra, secretario general de la Asociación Civil Transparencia —organización no gubernamental que participa como observador electoral— señaló a Convoca.pe que esta situación es extraña y que la resolución que dio la ODPE de Arequipa para instalar las mesas es irregular.
Para el representante de Transparencia, lo sucedido en el colegio arequipeño da pie para observar las actas y pedir la nulidad de los votos.
¿Quién los concentró en un solo lugar?
Pero no es lo único controversial en esta historia: ¿Cómo se determinó concentrar en un solo colegio a personas de este grupo etario vulnerable ante el COVID-19?, ¿los adultos mayores estaban obligados a ser miembros de mesa? La Ley Orgánica de Elecciones establece que los miembros de mesa mayores de 70 años tienen la opción de no participar de los comicios. Además, la norma específica para esta elección estableció que los mayores de 65 años no estaban obligados a votar, por ser considerados población vulnerable durante la pandemia.
En el local tampoco se podía obligar a los votantes que estaban en la fila a ser miembros de mesa, ya que días previos a la elección, el jefe de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), Piero Corvetto, aseguró que “ningún adulto mayor o persona vulnerable” sería invitada a ser miembro de mesa en caso no asistan los titulares.
Consultado por Convoca.pe sobre la razón por la cual se concentró a más de mil adultos mayores en un solo local y se eligió a personas de este grupo como miembros de mesa, el jefe de la ODPE Arequipa 1, solo señaló que el sorteo realizado por la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) el pasado 29 de enero, determinó esta distribución. La sede central de la ONPE también fue consultada por este medio de comunicación sobre esta situación, pero no recibimos respuesta hasta el cierre de esta nota.
Sin embargo, lo que establece la Ley Orgánica de Elecciones es que "la numeración de las mesas de sufragio y el sorteo de sus miembros" está a cargo de las ODPE de cada jurisdicción. En este caso, de Arequipa.