Actualización: 23 de abril de 2023.

El expresidente Alejandro Toledo aterrizó a las 7:02 de la mañana en el aeropuerto Jorge Chávez de Lima, proveniente desde los Estados Unidos, de donde fue extraditado luego de que se entregara a las autoridades por orden judicial. Llegó en un vuelo comercial acompañado de dos agentes de la Interpol y ocultando en todo momento bajo una manta sus manos esposadas.

Toledo fue dirigido a las instalaciones de la División Nacional de la Policía Área (DIPA), donde pasó por una evaluación médico legal. Luego fue trasladado la Sala Penal Nacional de la Corte Superior de Justicia, en el centro de Lima, para comparecer ante la jueza de turno Margarita Salcedo Guevara, quien verificó la identidad del reo extraditado. Consignó como su domicilio su residencia incautada de Camacho, en La Molina.

Alrededor de las 7:15 de la noche llegó finalmente en helicóptero al penal de Barbadillo, en el dristrito limeño de Ate. Allí permanecerá recluido por al menos 18 meses en cumplimiento de la orden de prisión preventiva emitida por el juez Richard Concepción Carhuancho.

Toledo fue extraditado por decisión del juez californiano Thomas S. Hixson y en Perú deberá responder por el caso Interoceánica Sur Tramos 2 y 3, que se encuentra en etapa de control de la acusación. El fiscal José Domingo Pérez ha solicitado una pena de 20 años y 6 meses de prisión contra el ex jefe de Estado. El Ministerio Público lo acusa de recibir un soborno de más de 30 millones de dólares de parte de la constructora brasileña Odebrecht a cambio de la adjudicación de la megaobra vial.

Toledo llegó al aeropuerto Jorge Chávez a las 7:02 am.

Nota original: 21 de abril de 2023

Toledo se entrega y responderá ante la justicia peruana

El expresidente Alejandro Toledo se entregó hoy, en una corte de California, después de evadir por seis años a las autoridades del Perú. En Lima responderá por los sobornos de Odebrecht en el Caso Interoceánica Sur, por lo que podría recibir una pena de 20 años de prisión. Tiene, además, otras causas penales pendientes

El fugitivo expresidente Alejandro Toledo se entregó hoy a las autoridades del sistema de justicia de Estados Unidos para ser extraditado al Perú, luego de una prolongada huída de seis años. El tiempo se quedó cortó para que presente más recursos para dilatar este proceso y esta mañana llegó desde su casa, ubicada en la acomodada zona de Menlo Park en San Francisco, a un edificio de la Corte de San José, donde debía ponerse a disposición de un alguacil ("US Marshal").

Como se sabe, el juez Thomas S. Hixson, de la Corte del Distrito Norte de California, había dado plazo final para su rendición hasta las 9 am de hoy, 21 de abril, hora local.

Anoche, sin margen para más estrategias legales, Toledo declaró ante la agencia EFE que acudiría a su cita con la Justicia.

"Le pido a la Justicia peruana que no me mate en la cárcel, déjenme luchar con argumentos", declaró. "Mi salud es muy mala. Tomo 14 pastillas diarias, tengo hipertensión y sufro por los remanentes del cáncer (...). Solo respeten eso. No han probado nada y ya me quieren meter en la cárcel", agregó.

En Lima, el exmandatario deberá comparecer ante el Primer Juzgado de Investigación Preparatoria del juez Richard Concepción Carhuancho, donde su caso está en etapa de control de la acusación. Se le acusa de recibir 30 millones de dólares de la constructora Odebrecht para beneficiarla con la adjudicación de los tramos 2 y 3 de la Carretera Interoceánica Sur.

El fiscal José Domingo Pérez, del Equipo Especial Lava Jato, ha solicitado una pena de 20 años y seis meses de prisión para Toledo, por los delitos de lavado de activos y colusión.

Las cuentas pendientes

Si bien la extradición de Toledo fue aprobada únicamente para responder por el caso Interoceánica Sur Tramos 2 y 3, la lista de expedientes podría ser ampliada si la justicia estadounidense aprobara otras solicitudes del Perú. Hasta ahora, Toledo también está involucrado en los casos Ecoteva, Interoceánica Sur Tramo 4 y aportes de campaña.

En el caso de Ecoteva, como ya lo ha revelado Convoca.pe años atrás, el rastro del dinero vincula los sobornos de Odebrecht y Camargo Correa con el patrimonio inmobiliario millonario que Alejandro Toledo adquirió luego de dejar la presidencia. La Fiscalía ha pedido contra él 16 años y 8 meses de prisión.

La acusación indica que a través de prestanombres se creó una serie de empresas en Costa Rica para recibir el dinero ilegal, canalizado por su amigo y testaferro confeso Yosef Maiman. La principal de estas compañías fue Ecoteva Consulting Group, que fue administrada por Eva Fernenbug, la suegra de Toledo.

A través de ella adquirió dos inmuebles en el distrito limeño de Surco: una lujosa casa de US$ 3,8 millones de dólares en Las Casuarinas y una oficina de US$ 882 mil frente cerca del Jockey Club. También pagó dos hipotecas: una de US$ 277 mil por su casa de Camacho, en La Molina, y otra de US$ 217 mil por su residencia de playa en Punta Sal, Tumbes.

Por este caso, la Fiscalía también ha solicitado la extradición de Toledo, de su esposa Eliane Karp y de su suegra Eva Fernenbug. Convoca.pe ha podido conocer que, a pesar de que el pedido tiene dos años y se han enviado comunicaciones para reiterarlo, hasta ahora Estados Unidos no ha respondido.

Otra acusación que complica el panorama del exgobernante es la del Tramo 4 de la Interoceánica Sur, que fue adjudicada al Consorcio Intersur formado por las brasileñas Camargo Correa, Queiroz Galvao y Andrade Gutierrez. En este caso se tienen evidencias documentales de presuntos sobornos que Camargo Correa entregó a Toledo a través de Maiman, que alcanzarían una cifra superior a los 4 millones de dólares para favorecerla. Además, se cuenta con la confesión de este último.

En esta causa, en noviembre de 2022, se solicitaron 35 años de prisión para Toledo por los delitos de colusión agravada y lavado de activos. Si bien aún no se ha anunciado un pedido de extradición por este caso, se espera que eventualmente responda por él. También se pidieron 29 años y cuatro meses de cárcel para el brasileño Marcos de Moura Wanderley, representante de Camargo Correa en Perú.

Y otro caso que aún está en investigación es el conocido como “Aportes de campaña”. Aquí se indagan las circunstancias en que Odebrecht desembolsó montos en efectivo para las campañas electorales de los principales candidatos a la presidencia entre 2006 y 2011. Si bien los presuntos financiamientos ilícitos para Ollanta Humala y Keiko Fujimori están individualizados en casos separados, la Fiscalía le sigue la pista a los demás supuestos beneficiarios señalados por Barata. Entre ellos, los expresidentes Pedro Pablo Kuczynski (US$ 300 mil) y Alejandro Toledo (US$ 700 mil).