Nota original

Cumpliendo con el quórum requerido por la ley orgánica de la Junta Nacional de Justicia (JNJ) los cinco miembros sesionaron pasada las 4 de la tarde de este miércoles para escuchar los argumentos de la magistrada María Zavala, ponente de la causa seguida contra Patricia Benavides Vargas.

El informe del proceso disciplinario N° 01-2024-JNJ, incluía, además de Benavides Vargas, a su hermana la jueza Enma Rosaura Benavides Vargas y a la fiscal provisional Azucena Inés Solari Escobedo a quienes se les procesaba por la comisión de faltas muy graves en el caso que beneficiaba a la jueza superior.

Por la mañana el abogado de Patricia Benavides, el excongresista Jorge Del Castillo denunció que se pretendía destituir a su defendida con "un informe de la inhabilitada Inés Tello que no tiene valor". Además calificó de "inexplicable" que la magistrada María Zavala sea la ponente de la causa pese a que "pidió inhibirse por decoro".

Faltas graves cometidas por las hermanas Benavides 

A pesar de la queja pública del abogado de Benavides se realizó la sesión donde Zavala identificó que las hermanas Benavides y la fiscal Solari participaron en un hecho donde la administración de justicia se vio afectada. 

En el caso de Patricia Benavides se le acusa de haber interferido en la situación judicial de su hermana, generando una situación que permitió remover de su cargo a la fiscal Betsabeth Revilla quien tenía a su cargo la investigación a Enma Benavides por el supuesto cobro de sobornos a cambio de la liberación de procesados por narcotráfico.

Zavala señaló en su presentación que la remoción de la fiscal Revilla fue una decisión arbitraria tomada de forma unilateral por Patricia Benavides. Para ello, señaló, utilizó un informe de baja productividad contra la fiscal que investigaba a su hermana Enma Benavides. Dicho informe  fue elaborado, a pedido, por la fiscal Azucena Solari quien colocó información inconsistente y “omitió correr traslado del informe a la fiscal Revilla”. 

En el caso de la jueza Enma Benavides el informe señala que la magistrada buscó interferir en el accionar fiscal para beneficio de su propia situación judicial, a través de su hermana Patricia Benavides al momento de alcanzar el cargo de Fiscal de la Nación. Además se señala que la ahora exmagistrada mintió a la opinión pública sobre sus antecedentes disciplinarios. 

El factor Falconí

Si bien la destitución de las fiscales Patricia Benavides y Azucena Solari contaron con el voto unánime de los miembros de la Junta Nacional de Justicia, en el caso de Enma Benavides Vargas el panorama fue distinto. Guillermo Thornberry expresó ante el pleno su conformidad con la ponencia de María Zavala en los extremos relacionados a Benavides y Solari, sin embargo expresó su voto discordante con el caso de la exmagistrada Enma Benavides.

“Si bien es cierto hay responsabilidades en su actuación, considero que la sanción no debe ser la destitución sino una menor en la que debería tomarse las medidas correspondientes por la institución que debe actuar en este caso”, señaló Thornberry al manifestar su acuerdo con Marco Falconí.

Precisamente la expectativa estaba en el magistrado Falconí quien en la audiencia de ratificación del jefe de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), Piero Corvetto, votó en contra de su continuidad, por ello se esperaba el sentido de su voto en esta audiencia.

En efecto, Falconí optó por una decisión “salomónica”, se opuso a la destitución de Enma Benavides y consideró que se debía remitir el caso a la Autoridad Nacional de Control (ANC) del Poder Judicial y votó a favor de la destitución de Patricia Benavides Vargas de su puesto de fiscal suprema y por ende de su cargo como Fiscal de la Nación.

Horas antes circuló una carta firmada por diversos personajes entre los que destacaban excongresistas y militantes del partido aprista donde hacían un llamado a Marco Tulio Falconí para “que así como tuvo la excelente decisión de no avalar la ratificación del señor Piero Alessandro Corvetto Salinas como Jefe de la ONPE paso que constituye una garantía de elecciones limpias (...) le pedimos que por ninguna razón se preste al juego antidemocrático de apoyar la destitución de nuestra (sic) Fiscal de la Nación Dra. Liz Patricia Benavides Vargas”.

El llamado aparentemente no tuvo el efecto deseado porque finalmente la decisión de la JNJ fue declarar infundados todos los pedidos presentados por la defensa de Benavides, entre ellos el no considerar los testimonios de su exasesor Jaime VIllanueva, así como designar a un nuevo miembro instructor ante la ausencia de la inhabilitada Inés Tello.

Queda pendiente la situación de Patricia Benavides en el ámbito judicial, pues este miércoles se suspendió la sesión donde se iba a analizar el pedido de la fiscal suprema Delia Espinoza, de la fiscalía de Delitos Cometidos por Funcionarios Públicos, de suspender temporalmente por 36 meses a Benavides Vargas de su cargo de fiscal de la Nación.

La audiencia se suspendió ante la inhibición del juez Juan Carlos Checkley quien fue recusado por la misma fiscalía en el caso que se sigue a Enma Benavides, al considerar los testimonios de Jaime VIllanueva quien acusó al magistrado de concretar “pactos ilícitos” con la hoy destituida Patricia Benavides.