Por Asis Loyola | 6 de mayo de 2021
Desde que se inició la crisis sanitaria por el Covid-19 en el país, agosto de 2020 había sido el mes en el que más personas contrajeron la enfermedad y fallecieron. Este récord fue superado en abril último, cuando se llegó a un nuevo pico con más de 256 mil contagiados y 9 mil 781 muertos.
Según el último reporte del Ministerio de Salud (Minsa), solo en abril se reportaron 256 mil 108 personas contagiadas con el coronavirus, lo que equivale a un promedio diario de 8 mil 536 infecciones. Esto significa que cada minuto, seis personas contraían el Covid-19. En cuanto a muertes, se mantiene la tendencia de una persona fallecida cada cinco minutos.
El virus del SARS-CoV-2 ha ido cambiando desde el inicio de la pandemia. Hay diversas variantes en el mundo, como la inglesa, la india, la brasilera, sudafricana y, la más reciente que circula en nuestro país, la C-37. Si bien las nuevas variantes son un factor que contribuye al incremento de casos, para el investigador Juan More Bayona este es un análisis muy simplista.
“Las variantes son un factor importante, pero sería desconocer que las personas también tienen un papel en que los contagios aumenten”, explica More, quien recomienda que las pruebas para detectar el virus se apliquen a un mayor sector de la población y no solo a los que tengan síntomas y acudan a un establecimiento de salud.
More también advierte sobre el peligro que representan las personas asintomáticas. “Aquellos que tienen síntomas y asisten a un centro de salud para realizarse una prueba tienen mayor probabilidad de salir positivo que aquellos que no tienen sintomatología”, resalta.
Para el investigador de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos es deber del Gobierno ampliar el segmento de pruebas para encontrar a más personas que llevan el virus en su organismo. More advierte que la falta de rastreo de contagios ha sido un factor importante en la cantidad de casos positivos dentro de la segunda ola de la pandemia.
El papel del Gobierno
De acuerdo con cifras del Ministerio de Salud y analizadas por Convoca.pe, llegar al pico de contagios en la segunda ola del coronavirus en el Perú ha tomado cinco meses, 30 días menos que durante el primer azote del Covid-19 y más contagios en los meses previos a abril reciente.
Las medidas que aplicó el expresidente Martín Vizcarra fueron más restrictivas, con cuarentenas totales y sin una reapertura del comercio. Por el contrario, Francisco Sagasti ha tenido un plan más moderado en cuanto a la salida de las personas a la calle.
A Sagasti le tocó lidiar con las fiestas de fin de año y otros feriados como, cuando las personas decidieron salir de Lima o juntarse con sus familiares. Tras Navidad y Año Nuevo, hubo un alza de más del doble de contagios en el Perú. Diciembre terminó con 51 mil contagios y enero, con 123 mil.
Para More hay un efecto directo en el tipo de medidas que se tomaron en ambos periodos, uno más restrictivo que el otro. “Hemos visto muchas imágenes de la Panamericana Sur repleta de autos en días festivos”, recuerda.
Además, el experto se refirió a la poca investigación y análisis que se realiza en el Instituto Nacional de Salud (INS) sobre las nuevas variantes, para conocer sus propiedades biológicas. “En el caso de la C-37, no sabemos si un virus es más dañino o si se comporta igual que las anteriores”, destaca.
Elecciones de la irresponsabilidad
Desde inicios de año, la campaña electoral fue el centro de la noticia y dejó de lado a la pandemia, la falta de oxígeno y la carencia de camas en las unidades de cuidados intensivos (UCI). Aunque las organizaciones políticas cambiaron los multitudinarios mítines por pequeñas reuniones y caravanas en las ciudades que visitaban, no se pudo conservar el distanciamiento social.
Entre enero y abril de este año se reportaron 786 mil 644 contagios, según el Ministerio de Salud. Para More, la campaña política reveló una “irresponsabilidad egoísta” de los candidatos, que pusieron el interés político por encima de la salud de la población y la de ellos mismos.
Los candidatos presidenciales Julio Guzmán, George Forsyth, Ciro Gálvez y Rafael López Aliaga son algunos de los candidatos que contrajeron el Covid-19 durante la campaña electoral.
Si bien existen protocolos de seguridad establecidos por la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) para la primera vuelta, según More no se ha fiscalizado o impuesto sanciones firmes a los que infringieron estas disposiciones.
“Se debió sancionar a aquellos partidos o candidatos que no cumplen los protocolos. No se han respetado los estándares mínimos de salud para realizar las elecciones en medio de una pandemia”, concluye More.