Las autoridades peruanas siguen esperando a que el prófugo traficante de armas Guillermo Burga Ortiz, de 84 años, se entregue a la justicia. Aunque Burga perteneció a la gran red de corrupción que depredó en los años 90 los fondos del Ministerio de Defensa —en confabulación con el ex asesor presidencial Vladimiro Montesinos y otros cómplices—, su prontuario no ha sido impedimento para que su hogar siga recibiendo hasta ahora dinero del mismo presupuesto del sector militar.
Pero esta vez, en una especie de vuelco hippie, la economía familiar de Burga Ortiz ya no se sustenta en las millonarias ventas amañadas de aeronaves de guerra ni de equipamiento bélico. Hoy la comercialización de flores es la que asegura un flujo constante de ingresos para una empresa muy cercana a él.
Convoca.pe comprobó que la florería Floridea SAC, fundada en 2007 y gerenciada por Carola Herwig Moritz, esposa del traficante condenado por la justicia peruana, ha facturado entre 2009 y 2021 con el Ministerio de Defensa un total de S/ 193 mil 509 soles. Si bien ha contratado además con otras instituciones públicas, las ventas al sector castrense —al que Burga defraudó en el pasado— representan el 68,4% del total de sus facturaciones con el Estado peruano.
Teniendo en cuenta que Burga antes había tenido contactos de alto vuelo al interior del gobierno fujimorista (1990-2000), incluido el propio Montesinos, y sobre todo en el sector Defensa al que vendía armamento, le consultamos a Carola Herwig cómo es que su empresa llegó a contratar con esta institución.
“No era la época de Fujimori [cuando empezaron los contratos], ni siquiera estaba en el poder el ‘señor este’. Y quién sería el presidente: la verdad es que no me acuerdo”, dijo en conversación telefónica con Convoca.pe.
En efecto, la primera facturación de Floridea SAC se registró en marzo de 2009 durante la gestión de Ántero Florez-Aráoz como ministro de la cartera, en el gobierno de Alan García.
“[En 2009] yo recién me iniciaba en la florería y me llamaron un día, del departamento de protocolo, y me dijeron si podía acercarme porque necesitaban urgente unos arreglos florales”, sostuvo. “Me presenté y parece que les gustó mi servicio y desde entonces (...) estuve ayudando con mis servicios florales”, agregó. Fue así de simple.
Este medio ha tenido acceso a las órdenes de compra que dicho ministerio ha emitido a nombre de Floridea. La orden más antigua, que correspondería a este servicio "urgente" con el que debutó esta florería, registró el siguiente concepto: "Servicio de arreglo floral para la reunión con la viceministra de la Mujer (...) y la Dirección General de Educación y Doctrina del Ministerio de Defensa". Costó 556 soles.
¿No conocía a nadie en el sector? “No, absolutamente. Yo, jamás. No los quería ni siquiera atender porque generalmente pagan muy lento. Los pagos son bien complicados. No es que tú entregas el arreglo [floral] y al día siguiente te dan tu cheque”, aseguró Herwig.
A lo largo de los años, el Ministerio de Defensa ha solicitado los productos de esta florería con distintos fines: desde la colocación de arreglos florales para las conmemoraciones de hechos de armas y aniversarios patrióticos hasta la entrega de arreglos fúnebres para velorios y pequeños recuerdos con peluches.
¿Qué conocimiento tenía el Ministerio de Defensa sobre la vinculación entre Guillermo Burga y Floridea SAC? ¿Se contempla tomar alguna medida al respecto? Intentamos obtener una respuesta de la institución pública que maneja el presupuesto militar, encabezada hoy por el exfiscal Juan Manuel Carrasco Millones. Para el cierre de este informe, el área de prensa informó que "la oficina encargada" aún seguía evaluando nuestras consultas.
De cualquier modo, las ventas de Floridea SAC tuvieron su mejor fortuna en el periodo de gobierno de Ollanta Humala, cuando Pedro Cateriano (2012-2015) y Jakke Valakivi (2015-2016) estuvieron a la cabeza de esta cartera. En el 2013, por ejemplo, la empresa relacionada al prófugo Burga tuvo su récord anual de ventas con el Ministerio de Defensa: S/ 38,178. En el 2014, alcanzó los S/ 34,647. Y en el 2015, también dio servicios por S/ 33,725.
Debido a la baja cuantía individual de cada servicio, estas contrataciones no pasan por licitaciones públicas, pero quedan registradas en las órdenes de compra emitidas por el propio ente gubernamental.
"No es una orden directa. Ellos siempre piden una cotización, no sé qué harán con esa cotización, y después de un tiempo, generalmente a última hora, me dicen: 'señora, por favor tenga la gentileza de proveer ese servicio y enseguida le saco la orden'", afirmó Herwig.
¿Todos los servicios que ofrece varían cada año? "Todos los años… Inclusive el personal rota, también. Las personas que conocía 'n' años ni siquiera están", dijo la esposa de Burga Ortiz. Pero pronto se corrigió: "Yo no conozco a las personas. Por eso yo me sorprendí de por qué me estaban llamando. Le pregunté al joven, ¿cómo saben mi telefóno? 'Señora, usted está en la guía telefónica'", contó Herwig.
Engranaje
Guillermo Burga Ortiz formó parte del “grupo de socios” de Vladimiro Montesinos, el jefe de facto del Servicio de Inteligencia Nacional (SIN) y mano derecha del gobernante Alberto Fujimori. Al ahora encarcelado Montesinos se le pagaban millones en comisiones por las licitaciones amañadas que ganaban sus socios para proveer material de guerra a las Fuerzas Armadas.
De esta fuente ilícita es que provienen los activos que la justicia ha ido incautándole desde entonces en cuentas bancarias de Panamá, Suiza, Luxemburgo, entre otros países. La hipótesis de una posible guerra con el Ecuador fue la razón que encontró el gobierno de Fujimori para justificar el incremento notable de los gastos del sector Defensa.
Como se sabe, los socios de Montesinos estaban ordenados en subgrupos que se repartían los contratos militares. En ese tiempo, Burga estaba relacionado con la firma proveedora Wotan International SA, manejada también por sus cómplices Claus Corpancho Kleinicke, ya fallecido, y Fernando Medina Luna, cuyo paradero actual es desconocido.
Junto con los otros socios de Montesinos (Moshe Rothschild, Luis Duthurburu Cubas, Juan Valencia Rosas, Víctor Venero Garrido, James Stone Cohen, entre otros), transferían el dinero mal ganado a cuentas bancarias cifradas en el exterior, operadas por sociedades offshore constituidas en Panamá, Bahamas y las Islas Vírgenes Británicas. Para ocultar el rastro de la corrupción, se valían de prestanombres y acciones al portador.
En octubre de 2021, en el marco del proyecto global Pandora Papers, Convoca.pe reveló que solo Burga estaba vinculado a 24 sociedades de papel constituidas en paraísos fiscales por el estudio panameño Alemán, Cordero, Galindo & Lee (Alcogal). Algunas habían dejado rastros en el Perú y al menos una seguía en actividad hasta nuestros días.
El contrato más gordo que ganó la red criminal orquestada por Montesinos fue el de la compra de las 36 aeronaves de guerra MIG-29 y Sukhoi-25 que no estaban en condiciones de entrar en combate. Se le pagó a esta mafia 591 millones de dólares. Fue la contratación pública más abultada que se registró en el período de gobierno de Fujimori. Para este negociado se creó la empresa Treves Intora Association Ltd en Bahamas, integrada por Moshe Rotschild Chassin —prófugo—, Enrique Benavides Morales —prófugo—, Claus Corpancho Kleinicke, César Augusto Crousillat López-Torres —prófugo— y Guillermo Burga Ortiz.
Debido a este escándalo, Burga fue condenado por la Corte Superior de Justicia de Lima en septiembre de 2021. La pena impuesta fue de cuatro años de prisión efectiva luego de que se le encontrara responsabilidad como cómplice primario del delito de colusión desleal en agravio del Estado.
Con la sentencia, se emitió una orden de detención a su nombre y, hasta el momento, el traficante de armas aún no se ha puesto a derecho. En el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec) consigna como su dirección legal la calle Santiago de Compostela 220, en la urbanización La Estancia, en el distrito limeño de La Molina. La misma dirección es utilizada por Floridea SAC, la florería administrada por su esposa que contrata con el Ministerio de Defensa.
El expediente judicial por el caso de los 36 aviones aún no ha terminado por completo. La Procuraduría Anticorrupción ha apelado la sentencia por considerar que la reparación civil establecida por el juez, de 6 millones de dólares, resultaba insuficiente. Los abogados del Estado han calculado que, según un documento que Convoca.pe ha podido revisar, el daño patrimonial ocasionado solo por los traficantes de armas equivale a 42,8 millones de dólares.
Apelación de la Procuraduría Anticorrupción - Caso Guillermo Burga by ConvocaRedes on Scribd
Consultada por la situación legal de su marido, Herwig Moritz dijo saber que el juicio ya había concluido, pero que no conocía sobre el tema de la prisión efectiva dictada contra Burga. ¿Acaso no se comunica con él? “Yo con mi esposo convivo”, confirmó la florista.
No debería ser difícil para la justicia peruana imaginar que el paradero del prófugo Burga es hoy su propio domicilio. Ahora, además, se sabe que el traficante de armamento comparte dirección legal con una florería proveedora del Estado.
Actualización: 7 de enero de 2022. 3:40 pm
Luego de la publicación de este informe, el Ministerio de Defensa envió un archivo de texto a Convoca.pe.
No respondió si volverá a contratar con Floridea SAC o si tomará alguna medida al respecto. Por el contrario, resaltó que la compañía no está impedida de contratar con organismos públicos, que se encuentra "activa y habida" en SUNAT y que tiene registro vigente en el Registro Nacional de Proveedores.
Las áreas del Ministerio de Defensa que requirieron los servicios de esta empresa fueron: Dirección General de Administración, Centro de Altos Estudios Nacionales (CAEN), Oficina de Prensa, Protocolo e Imagen Institucional, Dirección General de Recursos Humanos y la Alta Dirección del ministerio.
Agregó que se desconocía de la vinculación de Burga Ortiz y Floridea SAC con esta cartera pública y que sus adquisiciones y contrataciones "son claras y transparentes".