¿De qué manera los jefes de organizaciones, empresas o proyectos pueden generar una mayor confianza en sus equipos de trabajo? Julio Príncipe, psicólogo, coach y director de la compañía de consultoría Congruencia, recomienda aceptar que las funciones de un jefe ya no se centran solo en mandar y dar órdenes.

“Lo primero que necesitamos para liderar y organizar en la complejidad es reconocer que el mundo que conocíamos entre jefes que indican y trabajadores que obedecen se acabó hace mucho”, explica Julio Príncipe. 

El coach sistémico peruano ha colaborado en la escritura del libro “Organizar para la complejidad”, la primera edición en castellano del bestseller internacional del consultor y escritor alemán Niels Pflaeging, que ha sido presentada esta semana en la Feria Internacional del Libro de Lima 2022, y enseña cómo crear organizaciones ágiles a través de la descentralización.

“Hoy, más que nunca, necesitamos afrontar ese hecho y ver formas de que la toma de decisiones sea descentralizada, porque eso es lo que permite adaptabilidad y respuesta ágil a los cambios”, señala Príncipe.

Esta descentralización es muy importante, ya que tiene un impacto directo en la toma de decisiones de las empresas. Además, brinda la oportunidad de crear un mayor ambiente de confianza entre los miembros de un equipo y su líder. 

“Creo que hay una oportunidad en organizaciones que están empezando para evitar que se conviertan en una fábrica. La estructura tiene un sentido para la formalidad, pero no necesariamente es útil para la gestión”, agrega el psicólogo.

Por ejemplo, durante la pandemia del Covid-19, empresas en todo el mundo tuvieron que idear diferentes tipos de soluciones para salir adelante, las cuales -recomienda el coach- deben ser creadas en base al aporte de todos los miembros de un equipo, incluyendo a los jefes. 

“Si creemos que la labor del jefe es supervisar que las cosas vayan bien, ahí perdemos potencial de ayuda, pero si nos damos cuenta de que este jefe ayuda a crear condiciones para que la organización sea más fluida y la gente se ayude; ahí hay posibilidades de crecimiento”, resalta. 

Príncipe considera necesario cuestionar el rol de quienes lideran una empresa u organización desde un enfoque positivo, ya que contribuye a su crecimiento, sobre todo en tiempos de crisis. Por esta razón, el involucramiento de los jefes en cada una de las etapas del desarrollo de un proyecto laboral es fundamental. 

“Hay que hacernos la pregunta para qué es útil la posición de jefatura. En el liderazgo típico, yo soy el que decide y manda, pero necesito tomar un lugar de sostén, soporte, validación, que permita que la gente pueda aprender y relacionarse. Además, interesarnos por las historias de las personas y reconocer la diversidad que tienen le da más riqueza a los recursos del equipo”, concluyó Juan Príncipe.