Para Mariel Távara, psicóloga con formación en educación menstrual, el tabú sobre la menstrución genera en las muejres un impacto en la forma de pensar, de sentir y de relacionarse con el propio cuerpo, que marca mucho la identidad de quienes menstruamos. Por ello, consdiera que es importante abordar el tema de la menstruación para transformar los mensajes negativos y enviar mensajes que permitan conocer nuestros cuerpos y reconocer nuestra sangre como parte de un proceso. 

“Cuando una empieza a menstruar, siempre hay mucho tabú y se nos niega un poco el vivir una experiencia más plena”, advierte Mariel, quien dirige el proyecto Somos Menstruantes. Su iniciativa se basa en cuestiones personales sobre cómo proporcionar distintas y mejores herramientas a las niñas y adolescentes menstruantes.

Desde el 2019, a través de Somos Menstruantes, Mariel realiza talleres y cursos que, con juegos y diversas metodologías, proponen el diálogo entre las muejres, de todas las edades, con el fin de que puedan conectar con sus cuerpos y su menstruación. El proyecto tiene como objetivo contribuir a la generación de nuevos mensajes y promover prácticas de educación menstrual que permitan generar un vínculo más saludable con el propio cuerpo.

Desde los talleres realizados, la psicóloga ha podido observar que muchas niñas no reciben información antes de su primera menstruación, mientras que otras reciben información que cargan de forma negativa la experiencia, como la frase imperativa: “Aguanta, porque la menstruación duele”. Ante ello, advierte que este tipo de comentarios genera un contexto de rechazo a nuestros propios cuerpos.

Especialistas de Somos Menstruantes con mujeres del Círculo Pauer en un taller presencial de educación menstrual. Imagen: Somos Menstruantes 

“Creemos que la salud menstrual también es acercarnos con una narrativa diferente a nuestra menstruación y nuestros cuerpos, lo cual permite conectarnos de otra manera con nosotras mismas”, explica Mariel, quien agrega que es fundamental construir y reconstruir colectivamente saberes basados en lo que otras personas menstruantes viven.

Manuela González también es psicóloga y como maestra de Reikipro, una técnica de sanación energética, trabaja en temas de despertar femenino y salud menstrual desde hace casi 13 años. Recuerda que tuvo muchos dolores cuando menstruaba y, tras varios exámenes, le dijeron que era “normal”. Así se comenzó a interesar por el tema y a trabajar con plantas medicinales y con las parteras, a quienes llama “abuelas”.

Luego de varias conversaciones con estas abuelas, Manuela comprendió la importancia de conectarse con su sangre y "aprender a leer su propia sangre", ya que cada sangrado contiene los mejores nutrientes de nuestro cuerpo y nos brinda mucha información sobre nuestros estados emocionales, el estado de nuestros órganos, así como nuestro balance hormonal.

La especialista en salud menstrual explicó que reconectar con nuestra menstruación o "luna" es un acto político importante porque, de esta forma, se reconoce la sabiduría que todas las mujeres tienen en su cuerpo y se deja de lado lo que históricamente se ha impuesto como “lo mejor” para las mujeres. 

Manuela Gonzalez junto a las asistentes de la charla "Sanación, menstruación y cuidado". Imagen: Manuela Gonzalez

La maestra de reiki señala que existe una gran conexión entre nuestra menstruación y la luna porque los ciclos tienen una duración similar a los ciclos lunares. Sin embargo, aclara que esta es una forma básica de expresar la feminidad. "El momento de la menstruación es cuando cada una se introduce dentro de sus propias heridas profundas, lo que implica un momento de conexión con su propia ancestralidad y linaje femenino", comenta. 

Manuela realiza talleres para niñas, adolescentes, mujeres y hombres, con el fin de que cada uno pueda tener la oportunidad de conectar con su cuerpo, su sangre y su feminidad. A través de estos encuentros, busca la reconexión con el conocimiento profundo que hay detrás del sangrado, así como también ayudar a las nuevas generaciones a tener una mejor relación con sus cuerpos.

Imagen principal: Adobe Stock