Más de 2 millones de personas se han inmunizado contra el Covid-19 en el Perú. Sin embargo, el costo de las vacunas y el cronograma de entrega de las dosis es un secreto que el gobierno se ha negado a revelar en varias oportunidades.

Para formalizar la reserva de la información sobre estas vacunas, el 18 de mayo último, el Ministerio de Salud (Minsa) emitió una resolución ministerial que extiende el velo sobre la información relacionada con la compra de la dosis a los laboratorios.

La Resolución Ministerial 640-2021, firmada por el ministro de Salud Óscar Ugarte, aprueba clasificar como información reservada la información que se emita en la etapa de negociación, contratación y ejecución contractual para la compra de vacunas contra el Covid-19.

Con esta norma, los documentos sobre la compra de vacunas se mantienen en secreto y ya no pueden ser entregados a través de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública. El Minsa considera como información clasificada los informes emitidos por sus dependencias que sustentan la compra de vacunas a los laboratorios y la información generada para el otorgamiento del registro sanitario de estos productos.

La reserva también se extiende a la información sobre la contratación de seguros, pese que los contratos no se firman con los laboratorios, sino con aseguradoras contratadas por el gobierno, para asumir la responsabilidad por las reacciones adversas derivadas de la aplicación de las vacunas.

Es el caso de la información referente a la contratación de la aseguradora La Positiva por S/  1 millón 230 mil, este contrato fue firmado durante la gestión de Pilar Mazzetti en el Minsa. Los informes referentes a esta adjudicación y otras posteriores, a partir de la publicación de esta nueva norma, son clasificados como reservados.

Lista de documentos relacionados a las vacunas que fueron designados como reservados

El Ministerio de Salud justifica este bloqueo de la información con el argumento de que si son revelados, se perjudicaría los procesos de negociación con los laboratorios que elaboran las vacunas.

Además, señala que los contratos firmados para adquirir las dosis tienen cláusulas de confidencialidad, "ante un eventual incumplimiento (…), las contrapartes podrían emprender procedimientos arbitrales contra el Estado peruano", señala la resolución, que advierte que si se incumple esta cláusula, los laboratorios podrían detener la entrega de los lotes comprometidos en los contratos.

El secretismo del Ministerio de Salud se extiende a documentos relacionados con la gestión de la importación de vacunas. Foto: Andina

Aunque el Minsa señala en la norma que esta información será de conocimiento público una vez que venzan las cláusulas de los contratos con los laboratorios, no explica si este periodo corresponde a meses, años o décadas.

La norma también señala que la información declarada en reserva por el Ministerio de Salud sí está a disposición de alguna Comisión Investigadora del Congreso de la República, el Poder Judicial, el Contralor General de la República, el Defensor del Pueblo y el Superintendente de Banca, Seguros y Administradoras Privadas de Fondos de Pensiones.

Parche a resolución del tribunal

El pasado 5 de marzo, el Tribunal de Transparencia y Acceso a la Información Pública emitió una resolución que ordenaba al Ministerio de Salud que entregue las copias de los contratos de compra de vacunas al Consejo Nacional Para la Ética (Proética). Esta institución había solicitado la documentación a través de la Ley de transparencia, pero el Minsa se la había negado.

Proética apeló al Tribunal y este le dio la razón, al indicar que el Minsa no había clasificado esta información como reservada, por lo que tenía que entregarla. Otorgó un plazo de cinco días para cumplir con la entrega.

Parte resolutiva de la sentencia del tribunal que ordena entregar las copias de los contratos a Proética. 

Sin embargo, el Minsa no cumplió con entregar la información. Samuel Rotta, director ejecutivo de Proética, manifestó que les comunicaron que los contratos se encontraban lacrados por la investigación del caso "Vacunagate", iniciada por el Ministerio Público.

Con esta nueva resolución, el Minsa clasifica los contratos y la información sobre estos como reservada y coloca un parche ante la resolución emitida por el Tribunal de Transparencia y Acceso a la Información Pública.

Samuel Rotta explicó a Convoca.pe que con esta norma, el Minsa cumple su obligación de categorizar la información reservada e incluirla en su registro de información confidencial. Recordó que esta política obedece a las exigencias que los laboratorios hacen para negociar las vacunas contra el Covid-19. 

El representante de Proética resaltó que la clasificación se extienda hasta los informes que dan sustento a la firma de contratos y los referidos a la compra de seguros para las personas que reciben las dosis. Además, deploró que el ministerio no detalle cuándo vencen las cláusulas de confidencialidad establecidas en los contratos con los laboratorios.