El presidente Martín Vizcarra prometió un incremento del presupuesto en salud pública de cerca de 20 mil millones de soles para 2021 y lo calificó como histórico. Tras revisar los fondos destinados a dicho sector en los últimos 12 años, 'Convoca Verifica' concluye que lo proclamado por el mandatario es engañoso.
Desde 2009, hay un aumento constante en el presupuesto destinado a la salud pública, a excepción de 2016, cuando estaba al frente del ministerio del sector, Aníbal Velásquez, en el gobierno de Ollanta Humala.
A comienzos de 2010, el presupuesto inicial (PIA) destinado al rubro salud subió porcentualmente en más de 10% con respecto al año anterior. En 2015 tuvo su mayor aumento con 22,6%, llegando a ser de más de 13 mil 725 millones de soles en comparación con los 11 mil 197 millones de soles de presupuesto de 2014. En 2016, el presupuesto disminuyó en poco más de 254 millones de soles y aumentó en 2,4% en 2017.
En los dos siguientes años, los recursos para el sector salud volvieron a subir en su usual porcentaje:16,2% en 2018 y 13,7% el 2019. En 2020, sin embargo, el presupuesto tan solo subió 1,5% con respecto a 2019 llegando a 18 mil 495 millones de soles. Es decir, el virus del COVID-19 apareció en el Perú el año con más bajo crecimiento porcentual del presupuesto del sector salud en los últimos años.
De esta manera, los 20 mil millones de soles prometidos por el presidente Vizcarra para 2021, solo representaría un aumento en 8,1% en relación al presupuesto de apertura de este año: un porcentaje mayor que el año pasado, pero no con respecto a la evolución histórica del presupuesto en salud pública.
Si se toma en cuenta el presupuesto institucional modificado (PIM) en el sector salud en 2018 y 2019, las cifras superan los 20 mil millones de soles anunciados por el Jefe de Estado. Mientras que en 2020, el presupuesto con las partidas modificadas para enfrentar la pandemia en salud llega a 23 mil 589 millones si se toman en cuenta las cifras hasta el 27 de julio.
Convoca.pe conversó con Abel Salinas, ex Ministro de Salud de enero a abril de 2018, quien señaló que 20 mil millones de soles no es una inversión histórica en lo absoluto. Para que lo sea, este presupuesto debería estar por encima del 7% del Producto Interno Bruto (PIB) del país, agregó.
Perú solo destina el 3.2% del PIB como gasto público en salud, convirtiéndose en el segundo país con menor gasto público en la región andina, después de Venezuela, según los datos actualizados a 2018 por la Organización Panamericana de la Salud. Países como Ecuador, Colombia, y Bolivia destinan más del 4% mientras que Chile y Argentina asignan el 4.9%, y Uruguay, el 6.4%.
Augusto Portocarrero, ex consultor en temas de salud para el Consorcio de Investigación Económica y Social (CIES) y ex director de la Oficina de Planificación del Minsa, espera que el mandatario hiciera referencia al monto correspondiente solo a recursos ordinarios y no de toda fuente, que incluye transferencias. "Si solo se habla del recursos ordinarios, que vienen del tesoro público, el Presupuesto Inicial de Apertura de este 2020 fue de S/ 16 mil millones y pasó a S/ 18 mil millones". Sin embargo, advierte que se debe explicar mejor el anuncio de Vizcarra. La presentación del Pedro Cateriano en el Congreso debe servir para aclarar las propuestas del presidente, manifestó.
Un solo sistema
La reforma del sistema de salud, que consistirá en la constitución de un Sistema Público Unificado que agrupe al Ministerio de Salud y EsSalud fue uno de los anuncios del Mensaje a la Nación ante el Congreso el último 28 de julio.
Margarita Petrera, profesora de economía de la Pontificia Universidad Católica del Perú y consultora en temas de salud, manifestó que llegar a estas metas requiere mucho tiempo y recurso.
Le sorprendió que se mencionara la unificación del sistema de salud porque a la fecha no se han dado medidas concretas en esa dirección. El presidente Vizcarra anunció esto para el fin de su mandato, pero Margarita Petrera no está segura que el tiempo le alcance. Antes se tienen que realizar reformas tributarias y de financiamiento. Quizá se requiera la intervención del Congreso de la República.
La unificación señalada por el presidente Vizcarra podría significar muchas cosas. Augusto Portocarrero indica que se puede interpretar desde la creación de un organismo rector de ambas instituciones, hasta la fusión de ambos. Pero advierte, que juntar dos instituciones con problemas no necesariamente es una solución.
"Yo siento que su discurso ha sido muy optimista en el área de salud. Hace días la ministra de salud decía que el sistema está colapsado", señaló Margarita Petrera.
Abel Salinas afirmó que reformar el sistema de salud al próximo 28 de julio de 2021 era imposible. Para construir un sistema de salud “nuevo y sólido”, el proyecto de presupuesto debe invertir en un modelo de financiamiento y un modelo de digitalización, que permitan mejorar la capacidad de ejecución del presupuesto y de gestión pública. Es decir, para mejorar el nivel de atención y fortalecer la capacidad de respuesta del sistema de salud, como señala Vizcarra en su discurso, es necesario ser más eficientes en la ejecución y manejo de recursos públicos.
Respecto a la promesa de Vizcarra de poder afiliar a todos los peruanos al Sistema Integral de Salud (SIS) en el 2021, Salinas señala que esto no es viable y sólo conducirá a un mayor empobrecimiento de las personas con más bajos recursos económicos.
A pesar que el número de afiliados al SIS se ha incrementado, las personas que acceden a cuidados de salud financian más del 50% de sus gastos de salud con su propio dinero (un desembolso que la mayoría de veces no es planeado), según un estudio del Consorcio de Investigación Económica y Social (CIES). Esta investigación señala que los seguros cubren los gastos de salud de sus asegurados de manera poco significativa, y en los hogares más pobres, este financiamiento es casi nulo.
Texto: Fiorella Montaño y Shirley Cayetano. Análisis de datos y visualización: Edwin Montensinos.