Ocho años han pasado desde que la Comisión Multisectorial encargada del reconocimiento de los Pueblos Indígenas en Aislamiento y Contacto Inicial (Piaci) aprobó la ampliación y categorización de la Reserva Territorial Madre de Dios, y reconoció la existencia de los Mashco Piro, un Piaci, en esa zona. Sin embargo, el proceso se ha entrampado porque el Ministerio de Cultura, el Serfor, el Gobierno Regional de Madre de Dios y las municipalidades provinciales de Tambopata y Tahuamanu no logran ponerse de acuerdo sobre la situación de 14 concesiones forestales dentro del área de ampliación propuesta.

A la sombra de los altos árboles de la selva peruana, en zonas muy remotas de Madre de Dios y Ucayali, habitan los Mashco Piro, uno de los 20 pueblos indígenas en aislamiento y contacto inicial (Piaci) reconocidos por el gobierno peruano. Entre las tierras que ocupan está la Reserva Territorial Madre de Dios, pero también sus alrededores. Desde hace ocho años se espera que se incremente la superficie intangible de la reserva y se cambie su categoría para ofrecerles una protección mayor. Sin embargo, la propuesta no termina de concretarse debido a que diferentes entidades del Estado tienen posturas contradictorias respecto a la presencia de 14 concesiones forestales que existen hoy en la zona de ampliación.

“Estamos hablando en este caso de derechos humanos, de grupos o familias, personas como nosotros, que habitan un bosque y ese bosque los provee de recursos para su supervivencia. Básicamente son cazadores recolectores", explica Mauro Metaki Tipe, miembro del Consejo Directivo de la Federación Nativa del Río Madre de Dios y Afluentes (Fenamad). El dirigente indígena explica a Convoca.pe que su organización, como otras, ha insistido desde 2016 para que la reserva se amplíe. Y a pesar de las coordinaciones y los diálogos con distintas instancias del Estado, hasta ahora no se consigue.

Documentos de la Defensoría del Pueblo y del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) a los que este medio tuvo acceso dan cuenta de que la ampliación se planteó en 2016, cuando la Comisión Multisectorial Piaci aprobó un "estudio adicional de categorización de la Reserva Territorial Madre de Dios", y que son las concesiones forestales anteriores a esta propuesta las que generan los desacuerdos entre instituciones sobre cómo proceder.

Mientras existe esta indecisión dentro del Estado, los 14 concesionarios pueden seguir sus actividades en los bosques que se proponen como zona de ampliación del actual territorio de la Reserva Territorial Madre de Dios.

Un informe elaborado por el Instituto de Defensa Legal del Ambiente y el Desarrollo Sostenible Perú (IDLADS) da cuenta de que luego de la propuesta de ampliación de la Reserva Territorial Madre de Dios se construyeron, entre 2016 y 2021, más de 100 kilómetros de nuevos caminos forestales sobre la zona en debate. Según este estudio, la empresa maderera Canales Tahuamanu SAC y en menor medida la compañía Maderyja SAC serían las mayores responsables de la edificación de estas vías.

 

Evolución de la construcción de caminos forestales, entre 2016 y 2021, en el área propuesta como ampliación de la Reserva Territorial Madre de Dios en su camino a ser categorizada como reserva indígena. Fuente: IDLADS.

 

“En palabras muy cortas: nosotros pensamos que ninguna actividad económica en el Perú, en el mundo, debe ir o debe vulnerar los derechos a la vida y mucho más cuando hablamos de pueblos indígenas en aislamiento”, comenta por su parte el apu Julio Cusurichi, líder indígena de la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep).

Todo esto se da en un contexto en que han sucedido distintos encuentros entre el pueblo Mashco Piro y las personas de las zonas cercanas —naturales y madereros— que se han tornado hostiles e incluso han dejado muertos en los años posteriores a la propuesta de ampliación y categorización de la Reserva Territorial Madre de Dios.

Por ejemplo, en 2019, los Mashco Piro rodearon la Comunidad Nativa de Monte Salvado y, producto de ello, Segundo Ignacio Pío Díaz, comunero, fue herido por una flecha. En 2020, otro nativo de esa comunidad, Héctor Sandoval, murió por un ataque con el mismo tipo de proyectil artesanal. Y, en 2021, el maderero de la empresa Canales Tahuamanu SAC, Gean Marco del Águila Angulo, fue atacado y asesinado al encontrarse con los indígenas aislados. 

Monte Salvado se encuentra muy cerca de la propuesta de ampliación de la Reserva Territorial Madre de Dios. La concesión forestal de Canales Tahuamanu SAC está dentro de la zona que se pide que se incorpore al territorio protegido.

 

Canales
Ubicación de las concesiones de la empresa maderera Canales Tahuamanu S.A.C dentro de la propuesta de ampliación de la Reserva Territorial Madre de Dios. Fuente: IDLADS.

“Hace un año aproximadamente hubo un muerto de una empresa. Un trabajador de una empresa maderera justamente, que trabaja dentro de la ampliación de la Reserva Territorial Madre Dios, ha fallecido por impacto de una flecha de los indígenas y uno fue evacuado a Puerto Maldonado”, comenta Mauro Metaki Tipe, miembro del Consejo Directivo de la Fenamad. 

“Ahorita, el día domingo, hubo un reporte dentro de la ampliación de la Reserva Territorial, justo del sector [de la provincia] Tahuamanu: un grupo de indígenas aislados que han salido. Y mañana están yendo personal del Ministerio de Cultura, personal de jefatura del Parque Nacional Alto Purús a hacer el monitoreo”, señala. La presencia de los Mashco Piro en la zona propuesta para la ampliación de la Reserva no es rara, sino frecuente.

 

 

La madera y los derechos humanos

Las "reservas territoriales" y las "reservas indígenas" son territorios delimitados por el Estado peruano para proteger a los pueblos indígenas en situación de aislamiento y contacto inicial. Las reservas indígenas son una categoría superior creada por la Ley Piaci, en 2006, frente a la legislación anterior. La principal diferencia entre ambas es que las reservas territoriales son transitorias, mientras que las reservas indígenas son permanentes

“Lo que se llama reserva territorial es bajo el esquema de la legislación de los años 70 y lo que se llama reservas indígenas está bajo el esquema de los 2000. Para decirlo en general, son dos paradigmas y en realidad se supone que cuando se categoriza como reserva indígena, hay una mayor protección [a los Piaci]”, sostiene el abogado y director del IDLADS, Henry Carhuatocto.

En el caso de la Reserva Territorial Madre de Dios, establecida en 2002, lo que se busca desde el año 2016, de acuerdo con un informe técnico de Serfor, es la ampliación de 386 mil 400 hectáreas de su territorio.  

Frente a esta petición, el Ministerio de Cultura organizó un grupo de trabajo con distintos actores, públicos y de la sociedad civil, "para tratar la problemática de los derechos de aprovechamiento forestal y la protección del pueblo indígena Mashco Piro", según consta en un informe de 2019 realizado por la Defensoría del Pueblo. El 23 de agosto de 2017, esta instancia elevó su informe final a la Comisión Multisectorial Piaci, liderada por el mismo ministerio.

Ese documento recogió las propuestas presentadas por las organizaciones indígenas —representadas por Aidesep y la Confederación de Nacionalidades Amazónicas del Perú (Conap)—, por el Ministerio de Cultura, y por el Serfor —del Ministerio de Agricultura—, que entregó sus comentarios en conjunto con el Gobierno Regional de Madre de Dios y las municipalidades provinciales de Tambopata y Tahuamanu.

Las organizaciones indígenas pidieron la ampliación y categorización de la Reserva Territorial Madre de Dios junto con el retiro de las 14 concesiones madereras preexistentes. Por otro lado, Serfor, el Gobierno Regional de Madre de Dios y los municipios de Tambopata y de Tahuamanu se opusieron a la ampliación.

El Ministerio de Cultura, por su lado, propuso la figura de ampliación con “carga”, que implica extender la Reserva Territorial Madre de Dios respetando los derechos preexistentes de los concesionarios forestales y, a la vez, establecer medidas de protección para los Mashco Piro.

 

Grupo de trabajo
Extracto del informe Informe Técnico N° D000014-2021-MIDAGRI-SERFOR-DGGSPFFS-JZR.

 

¿Cómo es eso posible? “Nosotros ahí hemos cuestionado, porque no hay ninguna normatividad que permita aprobación con 'carga'. Para ellos, la aprobación con 'carga' era que se aprueba [la ampliación de la Reserva Territorial Madre de Dios] considerando las concesiones forestales y luego, de ahí, un proceso que termine la vigencia de estas concesiones. Hablamos de 20, 25 años y luego recién se iba, digamos, a sacar la resolución", comenta el apu Julio Cusurichi para Convoca.pe

“Hemos cuestionado porque ahí, con esa pretensión, estaban violando el derecho de no contacto, pero también el derecho de la intangibilidad que deberían tener estos pueblos [Piaci]”, finalizó.

Por otra parte, Serfor argumenta en un informe de 2021 que las reservas indígenas, de acuerdo con la Ley Piaci, están sujetas a evaluación cada diez años y, del mismo modo, que el Estudio Adicional de Categorización, aprobado en la Comisión Multisectorial Piaci en 2016, tendría para entonces “evidencias con más de cinco años de antigüedad”. 

 

Serfor
Extracto del informe Informe Técnico N° D000014-2021-MIDAGRI-SERFOR-DGGSPFFS-JZR.

 

Para el abogado Henry Carhuatocto, estos dos argumentos suponen un intento por poner en duda los hallazgos del Estudio Adicional de Categorización sobre la existencia del pueblo Mashco Piro en la zona, un Piaci reconocido bajo decreto supremo el año 2014.

“Ellos dicen 'ya pasó mucho tiempo, ese estudio debe estar desfasado'. Ya pues, haz tu estudio, contrata tu consultora y demuestra que no están ahí. La Deutsche Welle estuvo en junio del año pasado en la zona y no tuvo que irse muy lejos para filmar a los aislados que estaban ahí. Así que es un poco difícil que demuestren su inexistencia”, explica el también director del IDLADS.

“Cuando se hace el debate de qué está en juego, el aprovechamiento de recursos forestales versus la vida e integridad cultural y física de los pueblos indígenas, es un falso debate, porque no deberían pensarlo dos veces", advierte. "El asunto se está llevando por un tema económico, como el Ministerio de Agricultura lo está planteando. Van a tener millones y millones de soles, pero la vida de un ser humano, ¿tiene valor? No, es incalculable”, concluye Carhuatocto.

 

Mashco Piro
Foto de cámara trampa que muestra un grupo de Mashco Piro alrededor del puesto de control Canales por el alto río Tahuamanu. Fuente: IDLADS.

 

 

Una zona de poco control y un caso sui generis

Madre de Dios ha sido el epicentro de una mafia dedicada al tráfico ilegal de madera. En 2021, el caso "Los Hostiles de la Amazonía", resonó al colocar al descubierto una organización integrada por altos funcionarios del Gobierno Regional de Madre de Dios. De hecho, Luis Hidalgo Okimura, exgobernador de esta región, fue arrestado a causa de este caso en el 2022, en Brasil.

Para Mauro Metaki Tipe, miembro del Consejo Directivo de la Fenamad, este escándalo evidenció lo que ya era un secreto a voces: que algunos sectores del gobierno regional tienen intereses respecto a los recursos forestales.

“Este fue un caso escandaloso", recuerda. "Las autoridades generalmente que asumen la responsabilidad a nivel regional, inclusive a nivel local, están más ligadas a las actividades forestales”, comenta para Convoca.pe.

Pero otro asunto a tomar en consideración es que los Puestos de Vigilancia y Control (PVC), establecidos para custodiar las Áreas Naturales Protegidas, entre ellas, la Reserva Territorial Madre de Dios, se encuentran en pésimas condiciones. De los cinco puestos ubicados en esta región, de acuerdo a un informe elaborado por la Dirección General de Derechos de los Pueblos Indígenas, del Ministerio de Cultura, en abril de 2023 dos se encontraban inoperativos y tres requerían refacciones.

 

Puestos
Parte del Informe N° 000156-2023-DGPI/MC elaborado por la Dirección General de Derechos de los Pueblos Indígenas, del Ministerio de Cultura.

 

A Cusurichi le preocupa "que haya reservas territoriales en camino a categorizar y no se cuente todavía con los suficientes puestos de control, ni agentes de control" y "el hecho de que haya comunidades circundantes de esta reserva y que todavía ni siquiera se haya hecho un anillo del cordón sanitario para velar que estas comunidades también ayuden a proteger [a los Piaci]". "Todavía se está en ese camino. Por eso es que todavía miramos que hay una falta, digamos, de protección para estos pueblos indígenas [en aislamiento]” , refiere.

Existe otra experiencia similar a la de la propuesta de ampliación y categorización de la Reserva Territorial Madre de Dios. Es el caso de la Reserva Indígena Sierra del Divisor Occidental (SRISDO). Su categorización se aprobó en la Comisión Multisectorial Piaci en septiembre de 2023, hace poco más de 3 meses, y, según un documento de respuesta a un requerimiento de acceso a la información pública, la conclusión del proceso ya se da por hecho en el futuro próximo mediante Decreto Supremo.

 

Carta
Parte de la Carta 000004-2024-DGPI-VMI/MC, en respuesta a un requerimiento de información pública.

 

Este medio se comunicó con el Ministerio de Cultura y con Serfor para solicitar explicaciones sobre la situación de la Reserva Territorial Madre de Dios y el conflicto de superposición con las compañías madereras. Hasta el cierre de esta edición no se recibió respuesta a los pedidos de entrevistas.

Entretanto, el proceso para la ampliación y categorización de esta reserva continúa entrampado luego de ocho años y los derechos del pueblo Mashco Piro quedan en suspenso.