Cada día, un promedio de 30 agencias del Banco de la Nación permanecen cerradas temporalmente en todo el país, debido a que más de 400 de sus trabajadores fueron contagiados con COVID-19, según informó dicha entidad financiera del Estado a Convoca.pe. Estos cierres constantes afectan a miles de usuarios, pues el denominado “Banco de todos” paga los salarios de 1 millón 535 mil 218 trabajadores del sector público, las pensiones de 79 mil 262 jubilados y los subsidios de 1 millón 600 mil 588 beneficiarios de programas sociales, además de ser el único ente recaudador de las tasas por servicios que brindan diversas entidades estatales.

El impacto del cierre de las sucursales del Banco de la Nación, sobre todo en las zonas más alejadas de las urbes, es mayor por el aumento de la cantidad de usuarios, principalmente por el pago del segundo tramo del Bono Familiar Universal para la población más vulnerable, durante la pandemia del coronavirus, y con el próximo inicio del pago del segundo Bono Familiar Universal, a partir de septiembre. Esta situación ha generado largas colas y aglomeraciones, en los últimos días.

Solo entre el 16 de marzo y el 29 de julio, 489 de los más de 4 mil trabajadores que tiene el Banco de la Nación se contagiaron con el COVID-19 y 12 de ellos fallecieron, lo que provocó el cierre temporal de 224 de las 635 agencias que tiene en todo el país, de acuerdo con la información que la entidad estatal brindó a Convoca.pe, al amparo de la Ley de Transparencia. La edad promedio de los trabajadores contagiados es de 42 años, pues gran parte del personal de dicha entidad labora allí hace varios años.

La reducción del número de trabajadores también ha tenido que ver con que, desde el inicio del estado de emergencia nacional hasta el 29 de julio último, 2 mil 399 empleados se quedaron realizando trabajo presencial y 1 mil 617 fueron enviados a sus domicilios porque se encontraban dentro del grupo de la población vulnerable. De este último grupo, 816 realizan trabajo remoto. Para suplir a los ausentes, el banco solo contrató a 133 nuevos trabajadores. Esta información proviene de la subgerencia de Seguridad y Salud en el Trabajo de la institución bancaria.

Cierran, reabren y vuelven a cerrar

El último miércoles, en Arequipa, seis de las 11 agencias del Banco de la Nación en dicha región, en las provincias de La Unión, Camaná y Arequipa, estaban cerradas porque su personal se encontraba en cuarentena por el COVID-19. E incluso, los cajeros automáticos de dos de esas agencias no funcionaban porque ya no tenían dinero.

Esta situación fue constatada por la representante de la Defensoría del Pueblo en la Ciudad Blanca, Angel María Manrique, quien cuestionó que se interrumpiera dicho servicio durante el estado de emergencia nacional y en una zona del país que se encuentra en aislamiento social obligatorio (cuarentena). El MInisterio Público también realizó una acción preventiva, con la inspección de la fiscal Ana Cecilia Cordero a una agencia del distrito de Cayma.

Los cierres en Arequipa comenzaron con las sucursales de Miraflores (8 de junio), en la provincia de Arequipa, y de Acarí (19 de junio), en la provincia de Caravelí. Continuaron con las agencias de Punta de Bombón (3 de julio), en la provincia de Islay; de Cayma (22 de julio) y Arequipa (24 de julio), en la provincia de Arequipa; de Caravelí (25 de julio), en la provincia de Caravelí, y de Majes (29), en la provincia de Caylloma. Cuatro de estos ocho establecimientos reanudaron sus operaciones en junio y julio, pero dos de ellos volvieron a cerrar sus puertas en agosto, por nuevos contagios. 

En Lima, la capital peruana, han cerrado al menos 54 sucursales del Banco de la Nación, del 16 de marzo al 29 de julio; y siete, en la región Callao. Ni la oficina principal del Banco de la Nación, ubicada en la avenida De la Arqueología 130, en San Borja, se salvó del cierre, que se hizo efectivo el 1 de julio. En las 25 regiones del país se ha cerrado o sigue cerrada una oficina de este banco.

Luis Alberto Arias Minaya, quien fue presidente ejecutivo del Banco de la Nación hasta el 7 de mayo último, precisó a Convoca.pe que la mayor cantidad de agencias cerradas corresponde a sucursales especiales que funcionaban en entidades públicas, como el Poder Judicial y los ministerios de Salud y del Interior, a donde el público iba a pagar tasas, y en centros comerciales. Todos dejaron de atender al público debido a la cuarentena.

Al revisar la lista de las 224 agencias cerradas hasta julio, este medio verificó que solo algunas de las sucursales que dejaron de operar temporalmente estaban ubicadas en centros comerciales e instituciones del Estado, como las del aeropuerto internacional Jorge Chávez (19 de mayo), en el Callao; del Centro Comercial Lima Plaza Norte (19 de mayo), en Independencia; del Centro Cívico (20 de mayo), en el Cercado de Lima; del Jockey Plaza (3 de junio), en Santiago de Surco; del Cuartel General del Ejército (30 de junio), en San Borja; del Ministerio del Interior (26 de mayo), en San Isidro; y del Centro Comercial Gamarra (22 de mayo), en La Victoria.

“Durante mi gestión, se mantuvo una operatividad superior al 92%, en la parte más dura de la pandemia, según figura en los informes de continuidad operativa, que elaboraba diariamente la Gerencia de Riesgo del banco”, aseguró Arias.

Miles de pensionistas también son afectados por el cierre de las agencias en todo el país. Foto: Difusión

Más cierres en los focos de la pandemia

Lo que están padeciendo los usuarios del Banco de la Nación en Arequipa también lo han sufrido los clientes de más de 224 sucursales de todo el país, sobre todo de las localidades más alejadas. Dicha entidad destaca en su página web que llega a los distritos donde la banca privada no presta servicios. De las 635 oficinas que tiene en todo el territorio nacional, 60% son la Única Oferta Bancaria (UOB).

Por ello, el cierre temporal de sus agencias en estas zonas es muy grave, como en el caso de la sucursal Imaza-Chiriaco, distrito de Imaza, en la provincia de Bagua, en Amazonas, que dejó de operar el 16 de junio y no reabrió hasta fines de julio. Médicos, enfermeras, profesores y numerosos trabajadores del Estado no pudieron cobrar oportunamente sus salarios en plena pandemia. 

“Hace más de 20 días que el Banco de la Nación está cerrado, no hay atención ni en cajeros, nada. Mayormente, los profesores, los comerciantes, que están sufriendo por el COVID-19 quieren sacar dinero para tratar a sus niños, a sus familiares, para comprar su alimentación, no hay nada de atención”, contó a este medio digital, el mes pasado, un profesional de la salud, que tuvo que viajar a Bagua para cobrar su sueldo, pagando 50 soles por el transporte.

Aunque la Superintendencia de Banca y Seguros (SBS) solo autoriza a abrir una agencia si cuenta con un mínimo de dos personas, por razones de seguridad durante la pandemia, el Banco de la Nación reabrió las agencias hasta con un trabajador, según recordó el expresidente ejecutivo del Banco de la Nación, Luis Alberto Arias Minaya.

“Como cualquier otra entidad, más aún cuando estamos en permanente contacto con el público, nuestro personal está sufriendo de contagios en nuestras oficinas, lo cual nos obliga a cumplir con protocolos de bioseguridad y cerrar las oficinas por un determinado tiempo. La norma dice que el personal se tiene que ir en cuarentena 14 días pero, implementando acciones de contingencia, estamos abriendo las oficinas en un promedio de seis y siete días”, dijo Carlos Quevedo, subgerente de Servicio al Cliente del Banco de la Nación, en diálogo con Convoca.pe.

El funcionario estimó que, en promedio, 30 agencias permanecen cerradas en el día, entre las que reabren y las que vuelven a cerrar. Agregó que el cierre está focalizado en zonas donde se agudiza la pandemia, como Arequipa y Cusco, en el sur del territorio nacional. “Ahí también sufren nuestras agencias, nuestros trabajadores y nos vemos obligados a cerrar. Buscamos alternativas, opciones para poder reabrir las oficinas”, declaró.

Aviso en la agencia de Imaza, en Amazonas, que estuvo cerrada más de un mes. Foto: Gusman Kunchikui Akuts, residente de Imaza
 

Quevedo, afirmó que, desde que comenzó la pandemia, las transacciones en Ventanilla han disminuido y se han trasladado a los canales alternos, como agentes MultiRed, cajeros automáticos, banca celular y banca virtual. "A julio, el 81% de las transacciones del banco se realizan por canales alternativos presenciales y digitales", precisó.

Acciones ante los cierres

“El banco se está convirtiendo en un foco de contagio”, advirtió el secretario general del Sindicato Unitario de Trabajadores del Banco de la Nación-Sutban, Jorge Peña Moquillazas, quien advirtió que, además, el personal que reemplaza, provisionalmente, a los empleados ausentes no tiene el conocimiento ni las habilidades necesarias para atender rápida y eficazmente a los clientes, lo que repercute en la demora en la atención y, por lo tanto, en la aglomeración de personas.

¿Qué hace el Banco de la Nación para prevenir y disminuir los contagios? La Subgerencia de Seguridad y Salud en el Trabajo indicó que mantiene una política de puertas abiertas para contribuir a la ventilación natural y renovar el aire, que sus módulos tienen una separación mayor o igual a un metro, que el personal y los clientes usan mascarillas, que miden la temperatura corporal a todas las personas que ingresen a la agencia, que se abastecen de alcohol para los trabajadores y el público y usan pediluvios, con productos desinfectantes para la desinfección de las plantas de los pies, al ingreso de la agencia. La realidad evidencia que estas medidas no son suficientes para impedir que continue el contagio de los trabajadores bancarios y el cierre de más sucursales en todo el país.

Foto principal: Agencia principal del Banco de la Nación, en San Borja, también fue cerrada por algunos días, debido a contagios por COVID-19. Crédito: Difusión