Con la promesa de instalar una mesa de diálogo sobre la hoja de coca y cómo continuarán con la erradicación de este cultivo, el Poder Ejecutivo logró convencer a los dirigentes de los campesinos cocaleros de Puno para que depongan el paro que iniciaron hace una semana y cesen el bloqueo de la carretera Interoceánica, en el sur del Perú, que ha provocado un grave desabastecimiento entre la población de Madre de Dios.        

La instalación de la mesa técnica fue acordada anoche, en Lima, durante la reunión entre los representantes del Poder Ejecutivo y los agricultores de hoja de coca y las autoridades de Puno. Como en el acta no se garantiza el levantamiento del bloqueo de la vía Interoceánica, el vicegobernador de Madre de Dios, Jefferson Gonzáles, y el congresista por esa región Eduardo Salhuana se negaron a firmar el documento.

Esta mediodía, tras una reunión con los dirigentes cocaleros, la presidenta del Consejo de Ministros, Mirtha Vásquez, anunció que llegaron a un acuerdo para acudir el 28 de octubre a la ciudad de Juliaca, donde instalarán una mesa multisectorial de trabajo y que los campesinos se comprometieron a levantar su medida de fuerza. Sin embargo, los dirigentes y las autoridades de Puno insisten en que el gobierno cese la erradicación de la hoja de coca.

“Todos estamos de acuerdo en que, estando conscientes de que la principal lucha de este país tiene que ser contra el narcotráfico, también tenemos que considerar las demandas y preocupaciones que tienen los pequeños productores cocaleros de la zona”, dijo Vásquez, quien agregó que iniciarán un proceso de diálogo “para ver cómo vamos a continuar con la erradicación de hoja de coca”.

A su salida de la Presidencia el Consejo de Ministros, Julián Pérez, dirigente de los campesinos cocaleros, declaró que también hablaron sobre la actualización del registro de los agricultores y otros temas. “Si no se llegan a cumplir estos acuerdos, tengan por seguro que no solo será Carabaya sino todas las cuencas cocaleras”, advirtió. 

La mesa técnica estará conformada por representantes del Ministerio del Interior, la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), la Empresa Nacional de la Coca (Enaco), el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, el Ministerio del Ambiente, el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp), el Ministerio de la Producción, el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, la secretaría de Gestión Social y Diálogo de la Presidencia del Consejo de Ministros, el gobierno regional Puno y los gobiernos locales involucrados.

Luego de la reunión realizada anoche en Lima, con los representantes del Poder Ejecutivo, las autoridades de Madre de Dios criticaron al gobierno por no despejar la carretera Interoceánica Sur, en el tramo de ingreso y salida a esta región. A su retorno a esta región, el vicegobernador Jefferson Gonzáles advirtió que la población organizada iba a poner fin al bloqueo de la vía y que el gobierno regional iba a apoyarla.

“Es momento de hacer respetar los derechos de Madre de Dios, que no tenemos nada que ver con los cultivos de hoja de coca, pero nuestra única vía de ingreso y salida pasa por la vía interoceánica”, declaró Gonzáles a una radio local.

El acta de entendimiento que Gonzáles no quiso firmar anoche señala que “El ministro del Interior, Luis Barranzuela, hace la invocación al diálogo y exhorta a que la población deponga, de manera inmediata, la medida de fuerza que vienen emprendiendo en los distritos de San Gabán y Ayapata, en la región Puno, e Inambari, en Madre de Dios, con el despeje inmediato de la vía interoceánica sur ya que las medidas generan perjuicio a los derechos fundamentales de la población de las regiones de Puno y Madre de Dios, principalmente”.

Horas después, tras el anuncio de la premier Mirtha Vásquez, el vicegobernador Jefferson Gonzales, dijo que la huelga se iba a ir levantando de manera parcial. "Queremos ser un puente de diálogo más porque Madre de Dios ha sido perjudicado enormemente en sus actividades económicas (...) No tenemos nada que ver con el sembrío de hoja de coca porque nuestras actividades económicas son otras", dijo a un medio.

Gonzales advirtió que si no se instala la mesa técnica sobre la hoja de coca el próximo 28 de octubre, los campesinos volverán a tomar las carreteras y los afectados serán los pobladores de Madre de Dios. Hizo a un llamado a las "autoridades del Poder Ejecutivo para que no esperen mucho tiempo para tomar cartas en el asunto, ya que las autoridades regionales no tenemos competencia ni actos resolutivos sobre estos casos y ellos deberían intervenir de manera inmediata".

Esta semana se agravó el desabastecimiento de alimentos y combustible en Madre de Dios pues el bloqueo del puente Inambari, desde hace una semana, impide el paso de vehículos provenientes de Cusco. Las autoridades verificaron la ausencia de los productos básicos de primera necesidad en los mercados y la grave afectación a los productores y comerciantes que se desplazan por tierra con su mercadería, pues los productos perecibles se han malogrado.

En una entrevista con Convoca.pe, el representante de la Defensoría del Pueblo en esa región, Guimo Loaiza, informó que, hasta ayer, faltaba papa, camote, zanahoria, verduras y otros productos que llegaban a Madre de Dios desde otras regiones. "Los mercados están casi vacíos, los puestos de venta de abarrotes, de verduras, y ha subido el precio de lo poco que queda", señaló.

El representante de la Defensoría del Pueblo recordó que no es la primera vez que los campesinos cocaleros bloquean las vías para reclamar por la erradicación de la hoja de coca. "Este conflicto está desde el año 2019, cuando también hubo una situación similar, con el bloqueo de la carretera Interoceánica, porque el gobierno realizó acciones de erradicación de la coca. Esperamos que se pueda atender este problema de manera sostenida", dijo Loaiza.

Vehículos varados en la carretera Interoceánica por el bloqueo de la vía desde hace una semana por los campesinos cocaleros. Foto. Gobierno Regional de Madre de Dios

Muchos pasajeros han permanecido en los vehículos varados en la carretera Interoceánica y fueron afectados por las protestas, como ocurrió el último martes 19 de octubre, con la enfermera cusqueña María del Pilar Poblete, de 35 años, quien perdió un ojo porque los manifestantes le arrojaron una piedra durante el bloqueo del puente Inambari. La víctima, que se dirigía a trabajar en Puerto Maldonado, fue trasladada a un hospital en Cusco.

Esta semana, un vehículo del Centro Nacional de Abastecimiento de Recursos en Salud (Cenares), del Ministerio de Salud, que llevaba medicinas y otros insumos, valorados en más de 59 mil soles, fue saqueado y destrozado y los conductores fueron maniatados y secuestrados durante cinco horas.