Los daños en la pista de aterrizaje que provocaron el reciente cierre del aeropuerto de Jaén, en Cajamarca, a ocho días de haber reanudado sus operaciones tras una inversión de más de 4 millones y medio de soles (1 millón 200 mil dólares) en obras de mantenimiento, no fueron “inesperados”, como señaló la Corporación Peruana de Aeropuertos y Aviación Comercial (Corpac). La Contraloría General de la República ya había alertado sobre problemas en la ejecución y supervisión de los trabajos, algunos de los cuales supuestamente fueron corregidos, mientras que sobre otros no hay evidencia de que las empresas contratadas y la entidad aeroportuaria tomaran acciones.
Reparar de nuevo la pista de aterrizaje del también conocido como aeropuerto de Shumba para reanudar los vuelos comerciales entre Lima y Jaén tomará al menos otros 55 días, según informaron las autoridades de Corpac, que destacaron que “las obras complementarias” no implicarán un costo adicional pues están cubiertas por la garantía del contrato con el consorcio ejecutor, que hizo la obra en 120 días. Los trabajos de parchado se iniciaron el 17 de agosto último y deberían tomar 30 días. Los 25 días restantes, aseguraron, se destinarán al secado del material.
El aeropuerto de Jaén, oficialmente denominado Fernando Belaunde Terry, es importante porque conecta a los turistas con la Fortaleza de Kuélap y las cataratas de Gocta, ubicadas en la región Amazonas, y a los agricultores de café del norte peruano con inversionistas extranjeros. Entre julio y diciembre de 2022 este terminal aéreo registró 573 operaciones nacionales y movilizó a 70 mil 928 pasajeros, según reportes de Corpac.
Los directivos de Corpac mencionan que las presuntas fallas provendrían de los consorcios responsables de ejecutar y supervisar la obra de parchado asfáltico y señalización. Incluso, han convocado a la Oficina de Control Interno de la entidad para que revisen la situación, a pesar de que esta ya había emitido, este año, tres informes de control sobre el terminal aéreo.
Además, anunciaron una investigación interna en la entidad encargada de los aeropuertos del Perú, pues atribuyen la responsabilidad de la obra a la gestión anterior nombrada por el gobierno de Pedro Castillo, liderada por Jorge Salinas Cerreño. Con la asunción de Dina Boluarte a la presidencia, el 1 de febrero último el Fondo Nacional de Financiamiento de la Actividad Empresarial del Estado (Fonafe) designó como nuevo presidente del directorio al especialista en temas aduaneros Roberto de la Tore Aguayo, propuesto por el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC).
Con estos anuncios, el actual directorio de Córpac pretende liberarse de responsabilidad por lo ocurrido con el aeropuerto de Jaén. Sin embargo, la obra se inició el 11 de febrero de este año, cuando ya estaba a cargo la nueva gestión, y los informes de la Contraloría sobre situaciones adversas fueron emitidos en marzo, mayo y julio último, por lo que estos funcionarios debían haber tomado acciones para subsanar todas las observaciones.
A parchar los parches
El 5 de octubre de 2022, Córpac firmó contrato con el Consorcio Vial Diamante (Trujillo Bienes & Multiservicios E.I.R.L, Constructora Global Selva E.I.R.L. y KMC Constructores S.A.C.) para ejecutar la obra del aeropuerto cajamarquino por S/ 4 millones 531 mil 761 soles. El 10 de octubre contrató al Consorcio Puka Allpa (Empresa Mega Project Servicios de Ingeniería S.R.L. y Fernando Rafael Lean), para la supervisión, por 132 mil 858,93 soles.
La obra comenzó el 10 de febrero de 2023, un día después de que Corpac suspendiera las operaciones en el aeropuerto de Jaén. Los trabajos debían durar 90 días, hasta el 10 de mayo, pero tomaron 120 días porque estuvieron paralizados del 19 al 28 de abril debido a las lluvias extraordinarias que acompañaron al ciclón Yaku.
Córpac reanudó las operaciones en el aeropuerto de Jaén el 21 de julio último. “Las obras ejecutadas aprobaron satisfactoriamente todas las pruebas de tránsito realizadas para garantizar la seguridad de los vuelos que llegan y salen del aeropuerto de Jaén”, aseguraron los actuales directivos durante la ceremonia de reapertura del terminal aéreo.
Sin embargo, el 29 de julio Corpac dispuso el cierre temporal del aeropuerto “debido a una inesperada falla en la carpeta asfáltica de la pista de aterrizaje”. Anunció que las obras de reparación se realizarían entre el 30 de julio y el 13 de agosto de este año, pero recién comenzaron el 17 de agosto. Ante los cuestionamientos, sus directivos aseguraron que se iniciarán las investigaciones para determinar las causas y responsabilidades del caso.
El gerente central de aeropuertos de Corpac, Ronald Espinoza, dijo a Convoca.pe que paralizaron las obras porque la capa asfáltica se levantaba en la parte superior de la pista de aterrizaje por cada vuelo que pasaba. “Contratamos a ingenieros externos para evaluar el terreno. Entre los desperfectos, se encontró que la capa freática había subido demasiado y la humedad estaba muy cerca a la superficie. Eso hacía que se desprenda”, explicó Espinoza.
"Ha habido falla de material y falla de supervisión o de control del material que se colocó. A eso le sumamos lo del Yaku, pues la obra estuvo paralizada y en mayo estaba húmeda la pista. Se han sumado una serie de dificultades", reconoció Espinoza.
La obra en la pista de aterrizaje incluía diez parches, cuatro de los cuales han sufrido el desprendimiento en la capa asfáltica o hundimiento tras la reanudación de operaciones del aeropuerto, en julio último. Para evitar nuevos problemas, se está trabajando en todos los parches, informó Espinoza.
El 18 de agosto último, el presidente del directorio de Corpac, Roberto De la Tore, supervisó las obras que se realizan en la pista de aterrizaje acompañado por el alcalde provincial de Jaén, José Tapia, el alcalde del distrito de Bellavista, Fernando Rojas, y el gerente general de la cámara de comercio de Jaén, Fernando Soberón.
En esa ocasión, De la Torre reconoció que la empresa tuvo problemas para realizar los trabajos en el aeropuerto. “Coincido en que hubo un pésimo trabajo de la supervisión. Hemos contratado a otros expertos para que nos ayuden a determinar si el plan de trabajo de los contratistas es correcto”, dijo a la prensa al referirse a la intervención que se hará para reparar los cuatro parches en la pista de aterrizaje.
El funcionario aclaró que, con estas reparaciones, se busca mantener operativa la pista de aterrizaje hasta que se realice la solución integral, pues el MTC tiene un proyecto para construir un nuevo aeropuerto, aunque aún no hay fecha para ejecutarlo.
Tres informes de Contraloria
La Contraloría emitió un primer informe sobre la obra en el aeropuerto de Jaén el 30 de marzo de este año y halló siete situaciones adversas, tras revisar el expediente técnico e inspeccionar el aeropuerto. Alertó sobre el riesgo de que se afectara la calidad de los trabajos porque el Consorcio Vial Diamante no tenía el personal clave que exigían las bases de la licitación ni el equipamiento mínimo para cumplir sus funciones y obligaciones.
Una situación similar ocurrió con el Consorcio Puka Allpa, pues los inspectores tampoco hallaron al personal necesario para la supervisión. Además, detectaron deficiencias en el proceso constructivo e insuficiente control técnico de los supervisores en el asfaltado de la pista de aterrizaje, donde encontraron piedras en la capa de hormigón. “La situación expuesta podría generar el deterioro prematuro de la pista de aterrizaje, afectar la calidad de la obra y la vida útil del diseño”, advirtieron.
Otro hallazgo de los funcionarios de control fue que la primera valorización de obra, de febrero de 2023, consideraba mayores metrados a lo realmente ejecutado, “con el riesgo de reconocer a favor del contratista pagos a cuenta con montos superiores al que le correspondía”.
Finalmente, la Contraloría advirtió que Corpac no realizó el registro actualizado del estado de avance de la obra, en el sistema de información de obras públicas, Infobras, “situación que puede afectar la transparencia de la gestión, el control social; y, la supervisión y seguimiento de las obras públicas”.
Corpac respondió a la Contraloría que les había comunicado las observaciones al contratista y al supervisor de la obra. El Consorcio Vial Diamante justificó que los técnicos requeridos no se encontraran en la obra durante la inspección argumentando que no era necesario el 100% del personal y que no había el equipo mínimo obligatorio porque, de acuerdo con el cronograma, no correspondía realizar las obras que requerían dichos equipos.
La entidad aeroportuaria señaló que en el trámite de pago de abril consideró la aplicación de penalidades al Consorcio Puka Allpa. Sin embargo, no remitió a la Contraloría la documentación que corrobore la aplicación de dicha penalidad. Convoca.pe tampoco halló pruebas de dicha sanción en la página del Organismo Supervisor de Contrataciones del Estado (OSCE).
Sobre las piedras en la capa de hormigón de la pista de aterrizaje, el contratista informó que estas formaban parte del control topográfico pues las usaba como “plantillas” y que, luego, fueron retiradas. Sin embargo, el ente de control no recibió evidencia fotográfica de tal afirmación.
Respecto al incumplimiento del registro de la obra en Infobras, Corpac no tomó acciones. En cuanto a los mayores metrados consignados en la valorización de la obra el contratista y el supervisor no remitieron documentos de las acciones adoptadas.
Un segundo informe de la Contraloría, publicado el 9 de mayo de 2023, reportó cuatro situaciones adversas. La principal era que la obra no consideró el tratamiento al sistema de drenaje de la pista existente, “aspecto que podría afectar la calidad y vida útil de la obra”.
Respecto a la supervisión de obra, el consorcio a cargo no acreditó la realización de los ensayos de calidad a los materiales de obra de acuerdo a los estipulado en su contrato, “situación que podría afectar la calidad de la obra, al no contar con una recomendación oportuna de subsanar eventuales deficiencias en el control de calidad de los materiales por parte del ejecutor de obra”.
La Contraloría advirtió que no se acreditó la presentación de los informes quincenales por parte de la supervisión de obra, de acuerdo a lo estipulado en su contrato, lo que afectaba el seguimiento y control de la entidad y la oportuna toma de decisiones. Una vez más, recordó que Corpac no realizó el registro actualizado del estado de avance de la obra en Infobras.
En respuesta, Corpac comunicó que se tenía programado el servicio roce de vegetación y limpieza del sistema de drenaje y que el consorcio supervisor señaló en su informe quincenal que realizó ensayos de calidad, aunque no adjuntó los resultados. Para mantener el registro actualizado del avance de la obra en Infobras, anunció que iba a designar a un profesional del Área de Infraestructura y Titulaciones, pero no lo cumplió.
Un tercer informe de la Contraloría fue publicado el 11 de julio pasado, luego de que la obra finalizara el 28 de mayo. Se hallaron dos situaciones adversas: pese a que se culminó el proyecto, la partida “señalización del expediente técnico”, había sido parcialmente ejecutada “con el riesgo de afectar la recepción de la obra y el reinicio de las operaciones aeronáuticas”, y Corpac aún no actualizaba el registro del estado de avance de la obra en Infobras.
“Tanto el contratista como el supervisor contestaron las consultas que hacía la Contraloría y quedaron absueltas. Hicimos seguimiento a las recomendaciones que tiene ese documento. Pensábamos que todo estaba marchando bien”, aseguró a este medio digital el gerente central de aeropuertos de Corpac, Ronald Espinoza.
Consorcios con suerte
El Consorcio Vial Diamante está conformado por las empresas Trujillo Bienes & Multiservicios E.I.R.L, Constructora Global Selva E.I.R.L. y KMC Constructores S.A.C. Fue seleccionado entre nueve consorcios que presentaron su oferta a Corpac para ejecutar la obra del aeropuerto de Jaén.
La empresa Trujillo Bienes & Multiservicios E.I.R.L., representada por Lenin Trujillo Guadiamos, ha ejecutado nueve obras y brindado un servicio de consultoría a Corpac, desde 2020, por un total de 23 millones 356 mil 851 soles. Entre sus contratos figuran obras en los aeropuertos de Moquegua, Cusco y Amazonas.
La Constructora Global Selva E.I.R.L., a cargo de Manuel Natividad Trujillo Cruzado, ha tenido dos contratos con Corpac, en 2022, para realizar obras por un total de 7 millones 459 mil 457.31 soles, en los aeropuertos de Jaén y Amazonas.
Manuel Trujillo es también gerente general de Constructora e Inversiones San Juan Bautista S.A.C., que firmó dos contratos con Corpac para obras en el aeropuerto de Cusco, en 2022 y 2023, por un total de 10 millones 897 mil 598.01 de soles.
KMC Constructores S.A.C., gerenciada por Edgardo Johnny Príncipe Bogarin, sólo tiene un contrato con Corpac para la obra en el aeropuerto de Jaén. Entre 2011 y 2014, el empresario fue alcalde distrital de Urpay, en la provincia de Pataz, en La Libertad, por el partido Acción Popular, al cual está afiliado desde 2005.
Convoca.pe solicitó la versión del Consorcio Vial Diamante. Nos derivaron con su representante Lenin Trujillo, pero hasta el cierre de esta edición no obtuvimos respuesta a nuestras llamadas y mensajes.
A cargo de la supervisión de la obra en el aeropuerto de Jaén, está el Consorcio Puka Allpa, conformado por Rafael Lean Fernando y Mega Project Servicios de Ingenieria S.R.L.
Entre 2020 y 2022, Rafael Lean firmó seis contratos con Corpac para el servicio de consultoría y elaboración de expedientes técnicos de los aeropuertos de Moquegua, Cusco y los aeródromos de Caballococha y Atalaya por un total de 944 mil 999 soles.
Rafael Lean ha sido sancionado cuatro veces por el Tribunal de Contrataciones del Estado, entre 2015 y 2019. Estuvo inhabilitado 40 meses para contratar con el Estado, por presentar documentación falsa a la Municipalidad Distrital de Leoncio Prado, en Huánuco, cuando participó como miembro del Comercio Pueblo Nuevo en una licitación para rehabilitar un camino vecinal.
La empresa Mega Project Servicios de Ingenieria S.R.L., representada por Andrea Pantoja Tuanama firmó tres contratos con Corpac, en 2022, por el servicio de consultoría de obras para los aeropuertos de Jaén y Cusco y el aeródromo de Caballococha, por un total de 589 mil 316 soles.
El aeropuerto de Jaén inició sus operaciones el 28 de febrero de 1995, durante el conflicto bélico entre Perú y Ecuador. Fue remodelado en julio de 2016, en el gobierno de Ollanta Humala. Ese mismo año, el presidente Pedro Pablo Kuczynski inauguró el primer vuelo comercial hacia este terminal aéreo. Este año sólo la aerolínea Latam ha realizado vuelos en la ruta Lima-Jaén-Lima.
“Esa pista es un terreno muy lluvioso. Ya ha cumplido su vida útil, hay pantanos y focos de agua subterránea que dificultan estos trabajos. Por eso, hemos tenido que descender profundamente al hacer los huecos y poner desfogues que van a aliviar en algo la acumulación de agua”, explicó Ronald Espinoza, representante de Corpac.
Aunque la compañía estatal informó que la reparación de la pista de aterrizaje concluirá en octubre, esta obra es temporal porque permitirá que el aeropuerto de Jaén opere en los próximos ocho a 12 meses. Probablemente, el próximo año se tenga que hacer un nuevo mantenimiento.
“Hemos hecho el 30% del mantenimiento de la pista, falta el 70’%. Un mantenimiento mayor depende del MTC, que está haciendo un proyecto para un trabajo integral”, informó Espinoza, quien estimó que esto debería estar concretado para el 2025.
Para evitar nuevos problemas con los contratistas, Espinoza anunció que Corpac está evaluando realizar las licitaciones de obras de mantenimiento de las pistas de aterrizaje en Jaén y en todos los aeropuertos a su cargo a través de Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS).
Luego de entregar en concesión dos grupos de aeropuertos regionales, el MTC tiene previsto promover una inversión estimada de más de US$ 270 millones para mejorar la infraestructura y encargarse de la operación y mantenimiento del Tercer Grupo de Aeropuertos de Provincia. Sin embargo, no hay mayor información del avance del proyecto.
Este proyecto se encuentra en la cartera de la Agencia de Promoción de la Inversión Privada (Proinversión) e incluye a los aeropuertos de Jaén (Cajamarca), Jauja (Junín), Ilo (Moquegua), Rioja (San Martín), Chimbote (Áncash), Yurimaguas (Loreto), Huánuco (Huánuco) y Chinchero (Cusco). Los primeros siete terminales aéreos son operados por Corpac, mientras que el último está en construcción bajo la modalidad de Gobierno a Gobierno.
Para las aerolíneas, existe una diferencia marcada entre los aeropuertos concesionados y aquellos que se encuentran administrados por Corpac, cuya infraestructura es considerada insuficiente y deficiente. Además, destacan los problemas que presenta la entidad aeroportuaria en la administración de estos terminales aéreos. Estos son algunos de los factores que han influido de manera negativa en el crecimiento del sector; limitando el desarrollo de rutas regionales, según señala un estudio del Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de Uso Público (Ositran), realizado en marzo de este año.
En los últimos años, el deterioro de la pista de aterrizaje del aeropuerto de Jaén ha provocado el cese temporal de operaciones en varias ocasiones, debido al riesgo que representa para los pasajeros. Dos incidentes graves ocurrieron en febrero de 2022, cuando el terminal aéreo fue cerrado luego de que dos vuelos de Latam tuvieron problemas para aterrizar. Las llantas de los aviones sufrieron daños y una de ellas se reventó.
El cierre del aeropuerto de Jaén, durante más de ocho meses no sólo afecta a los habitantes, empresarios y turistas de esta ciudad, sino también de las provincias cercanas en las regiones de Cajamarca y Amazonas, como Bagua, San Ignacio y Chachapoyas. Según la Cámara de Comercio de Jaén, el cese de operaciones del terminal aéreo genera pérdidas de aproximadamente 3 millones de soles al mes.
"La parte social y económica de la zona se ve afectada. No podemos hacer nada. Era la seguridad de las operaciones versus continuar operando", dijo a Convoca.pe el gerente central de aeropuertos de Corpac, Ronald Espinoza. Las investigaciones de las autoridades confirmarán si la entidad aeroportuaria pudo o no hacer algo para evitar el cierre del aeropuerto de Jaén por fallas en las obras de mantenimiento.