En la mesa "El periodismo en la lucha contra la corrupción y la impunidad" los participantes reflexionaron sobre la importancia de estudiar los sistemas de corrupción desde una mirada sistémica, internacional, transfronteriza. La sesión inaugural contó con la participación de Mercedes De Freitas de Transparencia Venezuela, Raúl Olmos de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) y Zair Mundaray, exfiscal del Ministerio Público de Venezuela. Como moderadora actuó Milagros Salazar Herrera, directora de Convoca.
Los expositores destacaron que una lucha exitosa para enfrentar la corrupción es la existencia de más de 900 organizaciones de la sociedad civil que se han unido en una coalición en la lucha contra ese mal. En el caso de los periodistas, se han realizado diversas investigaciones con la participación de más de 400 periodistas en el mundo liderados por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación y diversas redes colaborativas y medios de comunicación donde el trabajo del periodismo independiente ha sido fundamental.
Mercedes De Freitas refirió que en Venezuela hay desafíos distintos al Perú porque parte de la red de corrupción surge desde el propio Estado. La operatividad de esa red de corrupción y crimen organizado es parte de la estructura y ello genera impunidad. Por mucho que se publique la justicia no se activa. Alertó que las redes de gran corrupción como la venezolana (chavismo), necesita conexión con otras organizaciones ilícitas internacionales para garantizar el lavado de dinero. "Nosotros ya identificamos que hay 122 casos abiertos en la justicia de 22 países, osea no es menor, sólo en Argentina hay 16 casos abiertos en la justicia, en Colombia hay 5, en Estados Unidos hay 51, en España hay 8. Son 22 países, estamos hablando de una red gigantesca. Solamente la mitad de esos casos hablan de 64 mil millones de dólares, eso es más que el presupuesto de muchos países juntos". Acotó que la red de corrupción opera en 72 países.
Zair Mundaray, exiliado en Bogotá, se refirió a los mecanismos de persecución a quienes investigan. “En Venezuela hay un quiebre institucional absoluto, que impide investigar a cualquier institución o persona porque los autores de la gran corrupción son las cabezas de los poderes públicos. La impunidad se gestó en el sistema de justicia que además es copartícipe de muchos de esos actos. Los dineros viajan, los bienes se multiplican, hay esquemas de lavado de activos muy profesionales, hay compra de activos, de bienes; el dinero proveniente de la corrupción es apetecible (…) Investigar crímenes de corrupción se constituye como traición a la patria, puedes tener la investigación muy clara, presentar los documentos, toda la evidencia publicarla y no pasa nada, porque no tienes a donde llevarlos, porque toda la estructura está alineada con la impunidad", anotó. Mundaray recordó el caso de un exfiscal general de Venezuela, que tenía una constructora que contrataba con el Estado venezolano, pero que él mismo sobreseyó los casos en los que estaba involucrado.
Raúl Olmos indicó que "los medios de comunicación independiente juegan un papel muy importante, son quienes sacan a la luz las verdaderas acciones del gobierno", consideró que uno de los retos más difíciles de su trabajo fue entender que el presidente tiene el control del legislativo y no existe un equilibrio de poderes, viendo una concentración del poder casi absoluto con el argumento de que él se debe al pueblo, justificado en sus altos niveles de popularidad logrando someter a la oposición mediante el chantaje”. Agregó que es importante retornar al periodismo cara a cara, al cultivo de fuentes, a propiciar el acceso a la información directa. La otra ruta a seguir fortaleciendo –como lo hace Convoca—es la red colaborativa en América que rompe fronteras y va más allá de nuestro entorno como país. “Algo que ocurrió en México puede estar rebotando en otra latitud. Este tipo de redes colaborativas debemos ampliarlas con organizaciones de la sociedad civil. Debemos aprender de la experiencia de otros países. Ellos nos alertan de los riesgos que pudiéramos vivir”.
Milagros Salazar concluyó la mesa señalando que la gran corrupción diversifica cada vez más sus esquemas para robar y está asociada a las economías ilícitas; se requiere gente altamente calificada que entienda esta complejidad: estudios casos, formar equipos multidisciplinarios. Detalló que los corruptos suelen contraatacar y argumentar que investigar los delitos de corrupción es traición a la patria. “No sólo los sistemas de justicia pueden combatir la corrupción porque la corrupción es trasversal y acapara las diversas áreas de la vida. Sin embargo, aquí nadie se ha rendido: seguimos trabajando y hay esperanza. Y es un trabajo de todos y todas: no sólo del fiscal, del experto, del periodista, también implica que como ciudadanos nos podamos involucrar en estos cambios”.
* En colaboración con: Jesús León Angeles
* El II Encuentro Latinoamericano de Periodismo para Investigar la Corrupción desde Diversas Miradas forma parte de #ProyectoColibrí, iniciativa que promueve la realización de conversaciones, encuentros y espacios de escucha de Convoca.