El ex ministro de Cultura y actual titular de la cartera de Trabajo Alejandro Salas respondió a las críticas que recibe el Gobierno del presidente Pedro Castillo por la supuesta falta de logros en la última edición del dominical televisivo Punto Final. Aseguró que al mandatario no se le permite exponer su trabajo en los medios, de la misma forma que a él no se le ha permitido hacerlo cuando estuvo al mando del sector cultural.
A raíz de esta respuesta, fue consultado por las acciones que ejecutó durante su gestión de seis meses, que culminó en agosto, tras ser transferido al Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE). Salas Zegarra aseguró que él y su equipo hicieron un "trabajo maravilloso" y mencionó como parte de sus logros la realización de dos políticas nacionales.
“Invito a que revisen [lo hecho en Cultura], para que vean el trabajo maravilloso que hemos hecho, que no hemos tenido la oportunidad de exponer", dijo.
"[Mencione] dos cosas maravillosas que ha hecho usted en el sector cultura", le solicitó la conductora Mónica Delta.
"La Política Nacional de la Lectura, el Libro y las Bibliotecas al 2030. [...] Aprobamos la Política del Pueblo Afroperuano; hemos creado el mapa geotécnico para ubicar donde están los peruanos a nivel nacional”, afirmó Salas.
Sin embargo, ambas políticas de gobierno estaban planteadas y, prácticamente, terminadas antes de que Pedro Castillo asumiera como presidente de la República el 28 de julio del año pasado. Por tanto, lo dicho por Salas es falso.
La Política Nacional de la Lectura, el Libro y las Bibliotecas (PNLLB) fue aprobada por decreto supremo el 12 de julio último, pero viene elaborándose desde el 2017. Incluso se hizo una consulta pública sobre el proyecto en el 2018, según explicó a Convoca Verifica el ex director general de Industrias Culturales y Artes del Ministerio de Cultura, Santiago Alfaro.
Sin embargo, en marzo de ese año, el Centro Nacional de Planeamiento Estratégico (Ceplan), organismo técnico adscrito a la Presidencia del Consejo de Ministros, cambió su metodología para hacer políticas públicas. Por ese motivo, lo avanzado con la PNLLB “tuvo que revisarse”.
Asimismo, en el 2018, el entonces director de la Dirección del Libro y la Lectura del Ministerio de Cultura, Ezio Neyra, comentó los avances en el diseño de la política nacional, que Alejandro Salas ahora señala como un logro de su breve gestión, en una entrevista a un portal de noticias de la Universidad Católica del Perú. “Estamos en una etapa de validación con expertos. En los próximos días, publicaremos esta política en nuestra web [del Mincul] a fin de tener una consulta pública. Finalmente, tendremos una mesa multisectorial con otros ministerios y, por último, se buscará su aprobación”, respondió Neyra en esa oportunidad.
Ya en el 2020 y, especialmente, en el 2021, la PNLLB fue sacada adelante. Según contó Santiago Alfaro, en el 2020 se destrabó un presupuesto que permitió formar un equipo encargado del diseño de la política. Para septiembre de 2021, mes en el que dejó el cargo Alfaro, todos los entregables que demandaba el Ceplan fueron presentados.
“Luego de esa fecha, lo que vino fue la revisión por parte del Ceplan de lo enviado y la realización de ajustes”, destacó. Y al igual que en 2018, el 21 de julio de 2021, el Ministerio de Cultura inició un nuevo proceso de consulta pública para recoger aportes, comentarios o sugerencias sobre el proyecto.
Durante la gestión de Salas, lo que principalmente se hizo fue culminar con la última etapa del proceso: el de la aprobación del texto final en el Ministerio de Cultura y en la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM). “El [Alejandro Salas] recibió una Política ya diseñada, al menos en casi su totalidad”, sentenció el ex funcionario Alfaro Rotondo.
Política Nacional del Pueblo Afroperuano
De otro lado, la Política del Pueblo Afroperuano (PNPA), considerada también por el ministro de Trabajo como otro punto clave dentro de su gestión en el sector de Cultura, es un proyecto que —tal como sucedió con la Política Nacional de la Lectura, el Libro y las Bibliotecas— fue trabajada antes de que ingresara Alejandro Salas a la cartera de Cultura, en febrero pasado. En efecto, es una labor que se ha venido desarrollando en los últimos años.
La PNPA, aprobada por decreto supremo el 2 de junio de este año, es una política pública que se ha realizado en base a encuentros con organizaciones civiles afroperuanas y expertos, pero cuya discusión se ha desarrollado un par de años antes del Gobierno de Pedro Castillo, apuntó Jorge Ramírez Reyna, presidente de la Asociación Negra de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (Asonedh).
El abogado defensor de los derechos de la comunidad afroperuana manifestó su preocupación respecto a que esta última acción del gobierno en beneficio del pueblo afroperuano “no quede en letra muerta” y tenga el presupuesto suficiente para ser implementada de forma adecuada.
“Es un proceso que tiene que darse, por ahora solo es una norma. Esperamos que pueda hacerse efectiva y no como ocurrió con una política pública de hace 4 años que fue anunciada con bombos y platillos, pero el presupuesto que se le asignó hizo poco o nada para el pueblo afroperuano. Muchas veces falta voluntad política para que se materialice un proyecto así, en tanto seguimos siendo víctimas de racismo, de exclusión y discriminación”, sostuvo el presidente de Asonedh.
Por su parte, la ex ministra de Cultura Gisela Ortiz aseguró que cuando ella asumió como titular de esta cartera en octubre de 2021, en reemplazo del ex candidato presidencial Ciro Gálvez, ambas políticas públicas —es decir la de la Lectura, el Libro y las Bibliotecas, como la relacionada al Pueblo Afroperuano— “estaban en proceso de tramitación, estaban encaminadas”. “La construcción de una política nacional recorre un camino muy largo, generalmente es un proceso que requiere de algunos años”, expresó.
Añadió que ella misma participó de talleres con la población afroperuana en Trujillo, por ejemplo. No obstante, aclaró que hubo demoras por parte de algunos ministerios de enviar información que se les pedía en relación a esta política, por lo cual no pudo seguir avanzando y terminar el proyecto mientras era ministra de Estado.
“He sido parte del proceso de construcción, pero no puedo afirmar que [una política] es solamente de mi gestión. Hay procesos que se dan y que a veces toca tener el logro, porque uno los encuentra en la última etapa, en especial cuando se trata de procesos largos. Pero no es que uno lo haya hecho. En todo caso, se podría decir que es una construcción colectiva”, subrayó.
Según Ortiz Perea, Salas estuvo en el final del proceso, uno que consta de varias etapas y termina cuando es aprobada por el Consejo de Ministros. “Eso no se ha construido en seis meses que ha durado su gestión. Debemos reconocer el trabajo y la apuesta de otros funcionarios dentro del Ministerio de Cultura, que seguirán impulsando medidas más allá de quién es el ministro o ministra”, resaltó.
En marzo de 2021, durante un evento institucional, el ex titular de Cultura Alejandro Neyra informó acerca de la propuesta para trabajar en una política nacional para el pueblo afroperuano como parte de la Política Nacional de Cultura al 2030, aprobada en julio del 2020. Uno de los objetivos de este documento es fortalecer la identidad cultural y, en ese sentido, es que comenzaron a trabajar en la formulación de ese proyecto a favor de la comunidad afrodescendiente.
Conclusión
La Política Nacional del Libro, la Lectura y las Bibliotecas es un proyecto que se gestó entre 2017 y 2018, cuando el Centro Nacional de Planeamiento Estratégico (Ceplan) cambió su metodología para hacer políticas públicas y el trabajo hecho tuvo que revisarse. Pero entre el 2020 y 2021, esta iniciativa estaba prácticamente terminada.
Un caso similar ocurrió con la Política Nacional del Pueblo Afroperuano, que se trabajó mucho antes de que ingresara Alejandro Salas como ministro de Cultura. Por la información expuesta, Convoca Verifica concluye que la atribución del actual ministro de Trabajo en relación a estas dos políticas nacionales no encaja con la realidad y su declaración es falsa.