Aunque Violeta Hoshi tuvo su primer acercamiento con el Mindfulness hace quince años, no fue hasta hace cinco que empezó a formarse como instructora de esta especialidad. Desde entonces, dicha práctica la ha acompañado en sus años como docente universitaria, psicóloga y coach.

“Estar presentes plenamente nos permite estar felices [...]. Una mente divagante es una mente infeliz. Aquellos que están presentes en lo que están haciendo muestran indicadores de bienestar y felicidad muchos mayores que los demás”, destacó Violeta en una entrevista realizada el miércoles 16 de agosto por Milagros Salazar, fundadora y directora de Convoca y Martha Bazán, coach ontológica integral y co-fundadora de Khuska, como parte del ciclo de charlas 'Ser íntegro' que realiza Convive en alianza con Khuska.

El Mindfulness es una práctica de origen milenario basada en la meditación. Consiste en entrenar la atención para estar "consciente del presente" la mayor cantidad de tiempo posible. Mindfulness proporciona al practicante de esta disciplina aptitudes esenciales como la confianza y la comunicación activa. “Cuando practicamos Mindfulness, nos hacemos mucho más atentos a lo que está pasando (en nuestro interior)”, comentó Violeta.

Según Violeta, el Mindfulness sirve para "potenciar cualquier ámbito" de tu vida. Por ejemplo, ella menciona que no solo la ha ayudado a desarrollar una mejora en sus habilidades socioemocionales, sino que también ha influenciado en las relaciones que tiene, como serían su pareja e hijos. "La integración del Mindfulness trasciende los niveles intrapersonales", destacó.

No obstante, no solo se reduce a un plano familiar. Violeta contó cómo las personas se vuelven “más conscientes y capaces”, mejorando el rendimiento en cualquier ámbito, como por ejemplo ocurre con sus estudiantes universitarios. “Cuando vivimos en el momento presente desde una actitud no evaluadora y sin juzgar, la vida cambia", mencionó.

Violeta considera que el mundo de las emociones está estrechamente ligado a la mayoría de males que aquejan al ser humano. Por ende, utilizando al Mindfulness como una herramienta para regular la emoción, se podrían presentar mejoras en el bienestar general. “La mayor parte de las personas empiezan porque hay un dolor o sufrimiento allí”, comentó, en alusión a cómo las personas se acercan a explorar los beneficios del Mindfulness.

Violeta consideró que el Mindfulness es una especie de práctica de diagnóstico para detectar las "primeras señales antes de un colapso", pudiendo así el practicante encontrar aspectos emocionales que puede mejorar tempranamente. “Si no hay amor en el corazón es difícil tratar bien a la otra persona [...]. Cuando no conozco mis emociones no las puedo regular, entonces la emoción me toma”, comentó Violeta.

Asimismo, recalcó que esta disciplina tiene un vínculo importante con la psicología. El Mindfulness "es una práctica que tiene un impacto directo sobre la salud física y mental. [...] Los procesos psicológicos no son ajenos a aquellas prácticas que influyen en el bienestar de la persona", exclamó.

Violeta se dedica a llevar varias iniciativas de educación relacionadas al Mindfulness. Por ejemplo, alista un programa de especialización para coaches y desarrolla espacios gratuitos semanales. Todos los martes desde las 18:00 hasta 19:00 (hora peruana), Violeta desarrolla un espacio de aprendizaje y práctica de Mindfulness, Compasión, Comunicación NoViolenta y temas de desarrollo personal en conjunto con su colega Jessica Mendoza. Además, todos los miércoles desde las 17:00 hasta las 18:30 imparte clases gratuitas acerca de cómo cultivar la compasión en colaboración con The HeartWell Institute.

Este diálogo con Violeta Hoshi inauguró el segundo bloque de "Ser íntegro", dedicado a ahondar en el mundo emocional como oportunidad de aprendizaje y transformación. El próximo miércoles 23 de agosto tendremos como invitada a Sandra Nieto, fundadora del instituto Alquimia del Ser de Argentina.