Mina Las Bambas produce anualmente 100mi toneladas de cobre

Comunidades y Consejo Regional de Apurímac quieren saber cuánto pagó Glencore a Sunat luego de vender mina por US$ 7 mil millones y retirar dinero a través de offshore.

La consejera regional de Apurímac, Evelyn Cavero, anunció que se solicitará al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) información sobre el monto que recibió el Estado por  impuesto a la renta a la ganancia obtenida de la venta de la mina Las Bambas por parte de la transnacional Glencore.

Tras la difusión del reportaje de Convoca.pe sobre la “operación oculta de la mina más cara del Perú’ donde se señala que Glencore Xstrata  terminó pagando un impuesto a la renta menor a lo esperado, la consejera Cavero indicó que los dirigentes de las comunidades de Cotabambas, solicitarán al presidente del Congreso de la República una comisión especial para investigar la “venta irregular”.

Asimismo, los dirigentes de las comunidades “también harán llegar documentos a la Fiscalía de la Nación y a la Contraloría General de la República” para que inicie las investigaciones del caso. Previamente, realizarán las reuniones que tiene programadas para elaborar sus pedidos.

Al ser consultada sobre la solicitud que hizo en 2015 el Gobierno Regional de Apurímac al presidente Humala sobre la venta de la mina tras el conflicto social desatado en la zona por las modificaciones del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) por parte de los nuevos dueños de la concesión, Evelyn Cavero indicó que “no existe ninguna respuesta”.

Para hoy estaba programada la sesión del Consejo Regional en Cotabambas, pero esta no se llevó a cabo por falta de quórum. Sin embargo, los miembros presentes se reunieron con los dirigentes de las comunidades donde acordaron una segunda sesión para la primera semana de mayo.

La consejera Cavero también indicó que parte de la agenda era definir qué acciones tomar debido a la cantidad de vibraciones permanentes de los explosivos que emite la mina, ahora a cargo del consorcio MMG Limited,  y que vienen generando fisuras en las viviendas de los pobladores del Tajo de Fuerabamba. “Ellos temen por sus vidas porque prácticamente son inhabitables muchas de ellas”, recalcó la consejera regional.