Un reportaje de Ojo Publico para la Plataforma de Investigación Periodística –integrada también por Convoca, La República y Wayka– reveló que el juez César Hinostroza intercedió por su “gran amiga” María Luisa Apaza Panuera ante el Consejo Ejecutivo del Poder Judicial (CEPJ) para acelerar su traslado definitivo a Lima.
( Ver: Especial 'Audios de la corrupción' )
En esta entrevista realizada antes de la publicación del reportaje, la magistrada a cargo del juicio histórico contra los Sánchez Paredes explicó que no es amiga del juez ni recurrió a él para que interceda por su traslado. Hoy, la Corte Suprema evalúa la situación de la magistrada, tras declarar en emergencia al CEPJ.
¿Cuál fue su trayectoria antes de la Sala Penal Nacional?
He sido fiscal en Lima durante nueve años. En 2004 fui nombrada como juez superior en la Corte [Superior] de El Santa y en 2012 fui destacada a la Oficina de Control de la Magistratura (OCMA), cuando la presidía el juez Enrique Mendoza. El 2013, cuando Mendoza asume la presidencia del Poder Judicial, yo fui convocada a la Sala Penal Nacional.
Usted reemplazó a la jueza Emperatriz Pérez Castillo en el Colegiado 'D'.
En 2015, durante la época del juez Víctor Ticona, asumí la presidencia del Colegiado D, donde nos hicimos cargo a dedicación exclusiva del caso Sánchez Paredes. No he tenido un acercamiento con Pérez. Solo de trabajo. La Sala Penal Nacional es un solo ambiente, donde conocemos a todos los magistrados por lo menos de vista.
¿Cómo conoció al juez César Hinostroza?
Con Hinostroza tengo una relación laboral, protocolar. Lo conocí cuando asumió el cargo de vocal supremo. Cuando se inaugura el año judicial, uno intercambia saludos con los vocales supremos.
¿Por qué comentó con Hinostroza su caso en el Consejo Ejecutivo del Poder Judicial?
¿Yo lo contacté al doctor? ¿Yo le hable para que influya en mi traslado?
Entonces, ¿cómo Hinostroza conoce su caso?
Desconozco cómo es que Hinostroza conoce mi caso. Mi solicitud de traslado es un tema administrativo. En 2016 solicité ante el Consejo Ejecutivo, que en ese entonces lo presidía Ticona, mi traslado a causa del grave estado de salud de mi esposo. El Hospital Rebagliati concluyó que mi esposo debía tener un tratamiento permanente en Lima.
¿El Consejo Ejecutivo presidido por Ticona revisó su caso?
No. El consejo de Duberlí Rodríguez sí lo revisó. Me pidieron un informe actualizado de la enfermedad de mi esposo, que presenté en abril de este año. Nunca más han vuelto a ver mi caso.
En este proceso, ¿cuál fue el rol de Hinostroza?
Hinostroza nunca ha sido miembro del Consejo Ejecutivo, que es el único órgano de gobierno que decide sobre traslados.
Hemos accedido a audios donde Hinostroza conversa con miembros del Consejo Ejecutivo para interceder por su caso. Le reitero la pregunta: ¿cuál fue el rol de Hinostroza en el proceso?
No ha jugado ningún rol porque hasta el momento no han aceptado mi solicitud de traslado. El Consejo Ejecutivo es un órgano autónomo. Yo no creo que Hinostroza pueda influir en magistrados de este órgano. Es imposible. En el supuesto que Hinostroza hubiese intercedido, mi traslado hubiese sido positivo.
Usted asegura que conoce a Hinostroza sólo en situaciones protocolares. ¿Por qué en estos encuentros le comenta sobre su caso?
Yo no le he comentado a Hinostroza nada. Yo nunca he tenido contacto por teléfono con el doctor.
Lo menciono porque Hinostroza demuestra conocer muchos detalles sobre su caso y la situación de su esposo.
Desconozco los motivos por los cuales Hinostroza tuvo conocimiento de mi solicitud. Habría que preguntarle a los consejeros. Tampoco recurrí a Hinostroza, no tendría por qué hacerlo: el derecho ampara mi solicitud de traslado. Un derecho que hasta ahorita no se atiende. Estamos impedidos de pedir favores a terceras personas.
En los audios incluso se refiere a usted como su “gran amiga”.
Yo no tengo amistad con el doctor. No es mi amigo, nunca he trabajado con él ni en la Corte del Callao. No entiendo por qué Hinostroza se ha expresado de esa forma sobre mi. No lo conozco como para conversar con él un tema tan privado. Este trámite solamente lo deben conocer los consejeros y yo.
¿Por qué cree que Hinostroza, incluso estando de vacaciones, llamó hasta al entonces presidente del Poder Judicial, Duberlí Rodríguez, para conversar sobre su caso? Nadie invierte tanto tiempo por alguien que, como usted menciona, no conoce.
Lo más prudente es preguntarle a él. Yo no sé por qué me habrá mencionado. En el caso que Hinostroza hubiera hablado sobre mi solicitud, el pedido hubiese sido atendido. No estaría paralizado. Para mí es algo engorroso porque nuevamente mi esposo tuvo que someterse a chequeos médicos.
¿Quién más sabía de su solicitud?
Mi familia. En el ámbito laboral soy muy reservada. Sabrán dos o tres personas.
Lo consulto para entender cómo Hinostroza tenía información detallada sobre su caso.
Yo no sé qué interés tendrá Hinostroza en que salga mi traslado. No lo entiendo ni lo sé. Lo que sí queda claro es que él nunca ha integrado el Consejo Ejecutivo, que está integrado por magistrados con autonomía de trabajo. No creo que Hinostroza esté influyendo en los consejeros para que dejen de lado su independencia y resuelvan antojadizamente.
¿En la práctica, usted continuará en Lima por el Caso Sánchez Paredes?
Sigo en Lima por ese caso. Yo soy una magistrada de carrera. A mi me incomoda que por un proceso administrativo se pretenda hacer daño a mi profesión. Yo no tengo por qué recurrir a terceras personas. No entiendo por qué me quieren perjudicar. Tengo mi conciencia tranquila porque no hice nada indebido.