Excandidata presidencial acudió al Ministerio Público para responder por aportes a su campaña que aún generan cuestionamientos.
La excandidata presidencial de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, acudió hoy a la Fiscalía antilavado para responder a las denuncias relacionadas a los aportes sospechosos recibidos durante la última campaña electoral.
Fujimori declaró por más de tres horas al titular de la Segunda Fiscalía Supranacional Corporativa Especializada en Casos de Delito de Activos, Germán Juárez Atoche, quien investiga en forma preliminar las denuncias relacionadas a los ingresos de dinero cuyo origen no sería conocido.
Un comunicado de prensa de Fuerza Popular difundido luego que su lideresa abandonara el despacho fiscal este mediodía sin declarar a la prensa, señaló que a la presidente del movimiento no le compete responder por los informes publicados por la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) respecto a los gastos de los partidos políticos sino al área de tesorería de la agrupación.
En un reportaje publicado el 8 de marzo Convoca.pe informó que su partido Fuerza Popular no consignó el nombre de las personas que colaboraron con la compra de tarjetas en los cocteles que organizaron. De los cinco cocteles reportados en la campaña de 2011 a la ONPE, solo se conoce la fecha y lugar en donde se realizaron. En los últimos comicios también se repitió la misma práctica con dos cocteles: en diciembre del 2015 y febrero 2016 en los que se recaudó 700 mil y 884 mil soles respectivamente. Son más de 4 millones de soles que reportó el partido liderado por Keiko Fujimori a ONPE por siete cocteles, entre 2010 y febrero de 2016, sin que se conozca quiénes contribuyeron.
El fiscal especializado en lavado de activos Germán Juárez también investiga la relación con LVF Liberty Institute constituida en Delaware (EE.UU) para recaudar donaciones para la campaña fujimorista sin consignar los nombres de los donantes. Un mes después de ser constituida, esta sociedad de papel transfirió, mediante una operación bancaria, casi 65 mil dólares (220,608 soles) a Fuerza Popular.
Durante la última campaña presidencial, también despertó la sospechas el papel que jugó el empresario y excongresista Joaquín Ramírez en la financiación del partido y el uso de sus propiedades para la campaña de Fuerza Popular que no fueron reportadas a ONPE. El patrimonio de Ramírez también está en la mira. En 2011 cuando Ramírez ingresó al Congreso declaró 11 inmuebles, por un valor de autovalúo de 3 millones 571 mil 344 soles, lo que equivalía a un millón 298 mil 678 dólares de la época. Al año siguiente, el monto total del rubro bienes declarado, disminuyó a 2 millones 943 mil 329 soles, que representaba 1 millón 111 mil 897 dólares. Convoca.pe identificó que ese año, el legislador no declaró cuatro de sus propiedades, tres en Lima y una en Chiclayo, que aún aparecían como suyas en registros públicos.
Sospechosamente, el congresista se abstuvo el 2012 de apoyar un proyecto que promovía fortalecer la Unidad de Inteligencia Financiera de la Superintendencia de Banca y Seguros, ampliando sus facultades para, por ejemplo, levantar los secretos bancarios.
En la nota de prensa de Fuerza Popular respecto a la presencia de Keiko Fujimori en la fiscalía antilavado, insistieron en que se resolvió y subsanó las observaciones que en su momento realizó la Gerencia de Supervisión de Fondos Partidarios de la ONPE. Sin embargo, en su momento Luis Mejía Lecca, tesorero del partido, dijo a Convoca.pe tras conocerse el primer coctel de campaña organizado en diciembre de 2015 que el partido no entregaría esa información “ni ahora ni después”.