Los Apus de las etnias Urarina, Kukama, Achuar y Quichua de las comunidades de Saramuro y Saramurillo se retiraron de las conversaciones sostenidas con el premier Fernando Zavala el pasado jueves argumentando que sus propuestas sobre la remediación de los daños ocasionados por los derrames de petróleo no eran consideradas.

Después de 75 días de paro en Loreto, los dirigentes nativos habían aceptado suspenderlo con la intención de negociar en Lima con representantes del Ejecutivo un Plan de trabajo que incluya una serie de medidas inmediatas entre ellas la remediación de pasivos ambientales.

Sin embargo, en las reuniones entabladas desde el lunes con el Premier Fernando Zavala, la ministra de Justicia, Marisol Perez Tello y el ministro de Defensa, Mariano Gonzales, en las instalaciones de la Base Naval del Callao, no asistió ningún representante de la sociedad civil pese a la solicitud de los indígenas. Los dirigentes traídos a la capital afirmaron a Convoca.pe que no hubo condiciones para un diálogo abierto.  

Cerca de un centenar de nativos participaron en marcha que

partió en Plaza San Martín. Foto: Kiara Alejos - Convoca.pe

Jose Fachin, líder de la Comunidad Quichua, afirmó que se sintieron “secuestrados” por el Estado, al punto que no se les permitía hablar con la prensa ni salir del lugar donde se realizaban las reuniones.

“Nos sentimos presionados a aceptar sus acuerdos que no concordaban con nuestras demandas”, afirma el representante de la delegación. Los nativos solicitan que se declare en emergencia ambiental y social las comunidades adyacentes a las cuencas afectadas por los recientes derrames de petróleo, que se efectúe un peritaje sobre el estado del Oleoducto Nor Peruano, la remediación urgente de los ductos del Lote 8 y el Lote 192, que se promulgue una Ley de Monitoreo y Vigilancia ambiental por parte de las comunidades, además, de constituirse una Comisión que investigue los daños y pasivos ambientales dejados en la zona tras 40 años de extracción petrolera.

 José Fachin (derecha) junto a otros dirigentes nativos en

la Plaza San Martín. Foto: Kiara Alejos - Convoca.pe

En un comunicado los dirigentes nativos recuerdan que desde el 2013 han solicitado al Ejecutivo declarar cuatro cuencas en Emergencia Sanitaria y Ambiental y solicitan al Ejecutivo una Hoja de Ruta para continuar el diálogo.

Los nativos marcharon la mañana de hoy viernes 18 de noviembre por el centro de Lima con dirección hacia una de las sedes donde se desarrolla el Foro de Cooperación Asia-Pacífico, APEC, para hacer públicamente  sus demandas, pero fueron impedidos por las fuerzas de seguridad.

El líder amazónico José Fachin, refiere que el agua que los niños y niñas beben del río Tigre está contaminado por las continuas roturas del Oleoducto Norperuano.  “Nuestra vida no se puede concebir lejos del río, pero ahora está enfermo por los derrames”, dice.

Los pobladores de las comunidades de Monterrico, Alianza, San Pedro y Santa Rosa cercanas a la cuenca del Tigre, ya no están seguros de la salubridad de los peces que consumen y que constituyen su principal dieta.

Apus de las comunidades de Saramuro y Saramurillo

participaron de marcha. Foto: Kiara Alejos - Convoca.pe 

El OEFA (Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental) ha reportado 13 derrames de petróleo en lo que va del año, como lo ha señalado el Centro Amazónico de Antropología y Aplicación Práctica (CAAAP). Diez de esos derrames son del Oleoducto Nor Peruano, administrada por Petroperu. La empresa estatal figura en el ranking de mayores faltas ambientales y sanciones según el organismo fiscalizador.

La última fuga de petróleo se produjo el 15 de noviembre, hace solo tres días. La empresa comunicó que el ducto había sido cortado por terceros y exigían que se realicen las labores de vigilancia e inteligencia para capturar a los responsable.

José Fachin dice al respecto, que en lugar de subsanar el problema de los derrames a fondo, se está buscando culpables y se busca desacreditar la protesta de las comunidades.

A pesar de que el dialogo con el gobierno se ha interrumpido momentáneamente, los dirigentes se mostraron dispuestos a continuar las conversaciones si se respeta su cultura y  la presencia de organizaciones garantes como Defensoría del Pueblo y organismos que velan por los derechos civiles. Los Apus permanecerán en Lima hasta lograr un acuerdo satisfactorio.

Explora los informes ambientales encarpetados en Loreto.