Curitiba, Brasil. Durante la tercera jornada de interrogatorios al ex representante de Odebrecht en Perú, Jorge Barata, este confirmó ante fiscales peruanos que la constructora brasileña aportó 3 millones de dólares a la campaña por el 'NO a la Revocatoria' promovida en 2013 a favor de Susana Villarán, entonces alcaldesa de Lima, según fuentes de Convoca.pe.
De ese monto, 1 millón de dólares fue entregado a José Miguel Castro, gerente municipal de la gestión de Villarán, según la versión de Barata. Tal como reveló este medio digital, Castro tuvo un rol protagónico en la concesión Rutas de Lima —otorgado por la comuna limeña a Odebrecht— y viajó a Brasil unos meses antes de los supuestos pagos indebidos.
El pago de la campaña fue 3 millones de dólares, 2 millones de dólares se entregaron en Brasil en reales (moneda local), porque las personas (que recibieron la suma) eran (los publicistas brasileños) Valdemir Garreta y Luis Favre. Pero la parte (para abonar) en Perú era 1 millón de dólares, afirmó Barata, de acuerdo con las fuentes de Convoca.pe.
El exdirectivo de la constructora brasileña refirió que José Miguel Castro (identificado como 'Budián' en planillas paralelas) actuaba en nombre de la alcaldesa Villarán y que incluso le reclamaba por los retrasos en las remesas de dinero.
Relató que José Miguel Castro se quejaba de que estábamos demorando, que había varias cuentas que pagar de la campaña Villarán, y que teníamos que agilizar proceso de pago.
Jorge Barata agregó que en un momento se sugirió la apertura de una cuenta bancaria con una empresa offshore y Castro propuso el nombre del ex funcionario edil Gabriel Prado. Como se recuerda, Prado tenía registrada una cuenta en la Banca Privada de Andorra (BPA), a través de la cual Odebrecht triangulaba los pagos ilícitos.
Yo no sé si le explicaron a Gabriel Prado si era para pago de la campaña. Pero la gente de BPA sabía que eran pagos indebidos, pero no se les daba mayor explicación, expresó.
En octubre último, el directivo de Odebrecht en Rutas de Lima, Raúl Ribeiro Pereira, había adelantado ante el Ministerio Público que la firma brasileña financió parte de la campaña a favor de Villarán. Cabe anotar que Convoca.pe destapó que la concesión Rutas de Lima aparecía en la relación de pagos de la oficina de sobornos de la constructora.
De otro lado, Barata confirmó que el ex titular de Ositrán, Juan Carlos Zevallos, y el directivo de la supervisora Alpha Consult, Jorge Peñaranda, recibieron en Andorra depósitos de dinero proveniente del Departamento de Operaciones Estructuradas de Odebrecht, usada para abonos ilícitos.
El ex superintendente de Odebrecht en Perú también indicó que él autorizó transferencias desde el Departamento de Operaciones Estructuradas (división de coimas) para unas cinco o diez personas, que empezaron a enviarse desde 2006 hasta 2012.
Ex gobernador regional de Cusco
La primera parte del tercer día del interrogatorio a Jorge Barata, el exsuperintendente de Odebrecht en Perú, se centró en los pagos ilícitos al ex gobernador regional del Cusco, Jorge Acurio, por la adjudicación del proyecto Vía Evitamiento de esta región a favor de Odebrecht y el ‘Club de la Construcción’.
Según Barata, Renato Ribeiro Bartoletti, exdirector de contratos de Odebrecht, le informó que Acurio solicitó el 3% del valor referencial de la obra, es decir 3 millones de dólares. Pero el exsuperintendente de la constructora brasileña se negó a aprobar el pago porque consideraba que Odebrecht tenía suficiente solidez técnica para obtener la buena pro. Tiempo después, la propuesta de la empresa fue descalificada.
Acurio volvió a insistir con el pago ante Ribeiro Bartoletti, según el testimonio de Barata, y esta vez prometió que no observarían la propuesta técnica de Odebrecht. Fue entonces que Barata admitió que aceptó pagar la coima y poco tiempo después la obra terminó siendo adjudicada a la constructora brasileña.
El exsuperintendente de Odebrecht también admitió que desde 2001 conocía la existencia del ‘Club de la Construcción’, conformada “por 15 a 20 compañías”, según narró, que se turnaban la adjudicación de obras convocadas por Provías Nacional. Sin embargo, apuntó que Ribeiro Bartoletti y Raymundo Trindade Serra, directivos de Odebrecht, eran quienes asistían a las reuniones del ‘club’.
Barata aceptó que sabía que la constructora peruana Graña y Montero, su socia en proyectos importantes, también formaba parte del cártel. Y que a pesar que Odebrecht participaba en este grupo, consideraba que eran muchas empresas expuestas en acuerdos colusorios por proyectos relativamente pequeños. Barata explicó que la constructora brasileña prefería participar en obras de mayor envergadura.
El Ministerio Público investiga las prácticas corruptas de estas compañías en un periodo que va desde 2011 hasta 2014. Sin embargo, Barata aclaró que no podía dar mucha más información sobre los acuerdos del ‘Club de la Construcción’ de esos años porque estuvo al frente de los proyectos de construcción de la compañía en Perú hasta 2012 y luego pasó a liderar Odebrecht Latinvest.
Arbitrajes a la medida
La sesión de la tarde del interrogatorio a Jorge Barata comenzó con el caso de los arbitrajes que favorecieron a Odebrecht en perjuicio del Estado peruano.
Barata confirmó que los pagos para el árbitro Horario Cánepa se hicieron a través del Departamento de Operaciones Estructuradas de Odebrecht y que se le pagó de dos formas: un pago fijo pre-acordado y un pago de éxito que se realizaba en función de laudos arbitrales a favor de la constructora. Esto último equivalía al 1 por ciento de lo que Odebrecht ganaba como resultado de un laudo favorable.
El exsuperintendente de Odebrecht en el Perú confirmó que Sergio Nogueira Panicali, quien fue director de contratos del tramo 2 y 3 de la Interoceánica Sur, se encargó de negociar los pagos con Cánepa. En su testimonio de febrero último ante los fiscales peruanos, Nogueira relató cómo se contactó con este abogado y manejó el tema de los arbitrajes.
Con la colaboración de Paul Tuesta Vargas y Jackeline Cárdenas.