El prófugo empresario Gustavo Salazar Delgado busca acogerse a la colaboración eficaz, pero no lo cuenta todo sobre su participación en el caso del presunto soborno de Odebrecht a Jorge Acurio Tito, ex gobernador regional de Cusco. Se sabe que en junio último presentó una solicitud al Ministerio Público para revelar “la ruta del dinero” transferido por la constructora brasileña.
El hombre de negocios, cuyas declaraciones fueron publicadas hoy por El Comercio, insistió en que su relación con el funcionario cusqueño era “meramente comercial”, a raíz de un inmueble que supuestamente le iba a vender.
Sin embargo, el recorrido de la coima para favorecer a Odebrecht en la adjudicación de la obra de la Vía de Evitamiento de la ciudad imperial ya ha sido trazado por el equipo fiscal liderado por el magistrado Hamilton Castro
Ver: Pagos indebidos por obra de Cusco proceden de banco comprado por Odebrecht
El Ministerio Público ha sostenido que, a través de la offshore Klienfeld Services Ltd, la constructora brasileña abonó 1’250,000 dólares a la cuenta de Wircel SA —de propiedad de Salazar— en el Crèdit Andorra de Panamá, como lo confirma un extracto de cuenta en dólares bajo su poder. Este monto luego habría sido retirado y entregado en efectivo a Acurio Tito como parte del presunto pago ilícito.
“Lo que acepto es en lo que me estoy viendo involucrado hoy por no haber conocido a esta empresa Klienfeld”, dijo.
Inconsistencias y omisiones
Salazar Delgado confirmó que se reunió con el brasileño Renato Bortoletti, director de Contratos de Odebrecht, señalado por un colaborador eficaz como el coordinador del pago del soborno. Pero, aseguró que no lo reconoció como directivo de la constructora, pues este se presentó “por encargo” de Acurio y “por una empresa que se llamaba Klienfeld [Services]”.
“La única vez que me he reunido con el señor Renato fue en esta vez en mi oficina [para tratar el asunto inmobiliario de Acurio]. Más allá, jamás”, indicó.
No obstante, en una agenda verde incautada en la oficina de Salazar, a cuyas copias accedióConvoca.pe, se puede leer una anotación tachada que señala: “VÍA DE EVITAMIENTO (ODE) RENATO”, entre otros apuntes sobre otros proyectos de la región.
Las menciones “Renato” y “ODE” se estiman posteriores al pago del soborno (2013), pues figuran en conjunto con una anotación que señala a Edwin Licona como “presidente [gobernador] regional” de Cusco, que asumió el cargo en enero de 2015. Licona, se conoce, continuó realizando pagos a la constructora brasileña hasta abril de 2017 por la Vía de Evitamiento.
De otro lado, Salazar señaló que podría dar información sobre cómo intervino en el proceso del Hospital Lorena de la misma ciudad, adjudicado durante la gestión de Acurio a la también investigada brasileña OAS, cuyo contrato fue resuelto por incumplimiento en 2015. En la actualidad, está próximo a convocarse un nuevo proceso por el saldo de la obra.
“Es información netamente de lo que sé por los propios seguros que se tenían que tomar pero lo relataré como parte de mi colaboración también”, indicó el empresario prófugo.
Investigaciones de medios periodísticos cusqueños han revelado que el involucramiento de Salazar en el caso de dicho centro de salud excede a su función como corredor de seguros.
De hecho, respecto al nuevo proceso por el saldo de obra, la Fiscalía Anticorrupción encontró en el allanamiento de sus oficinas una cédula de notificación dirigida al representante de la supervisora del expediente técnico, una anotación a mano de cómo un especialista del MINSA (Ministerio de Salud) debía recomendar que el saldo de obra y el equipamiento debían licitarse en "paquete" en un solo proceso, entre otros documentos.
Incluso, un post it señalaba “salir en programa para hablar de OAS que ellos han mejorado” [sic], debajo de una anotación que advertía una irregularidad en la firma del contrato del expediente técnico del saldo de obra del que, además, tenía una copia.
Por último, Convoca.pe reveló en agosto pasado que existían indicios de irregularidades en el Hospital Hipólito Unanue de Tacna, cuyo proceso de licitación en 2015 era seguido muy de cerca por Salazar, según se desprende de sus anotaciones y documentos incautados el 17 de mayo reciente.
Este caso no incluye a empresas brasileñas —por lo que no es revisado por el equipo especial del fiscal Castro—, pero aparece de nuevo la offshore Wircel SA de Salazar, con la que se habría cobrado la coima de Acurio, en un modelo de “contrato de prestación de servicios de asesoría” por 11’400,000 soles para ayudar a participar en una licitación convocada por el gobierno regional de Tacna. Sus clientes serían Constructora Mediterráneo SAC (hoy CMO Group SA), Mantto SAC y Neso Contructora SAC. También aparecen otros documentos comprometedores.
Al final, las obras de mejoramiento del hospital fueron adjudicadas por 279 millones de soles al Consorcio Salud Tacna, integrado por Mantto SAC, Neso Constructora, Riva SA, Eductrade SA, Assignia SA y Árgola Arquitectos.
El congresista Jorge Castro, que también investigó el caso en el parlamento, presentó nuestros hallazgos a la fiscalía.
Sobre este proceso de licitación Salazar no se ha pronunciado hasta el momento, pues su solicitud para acogerse a la colaboración eficaz solo ha sido remitida para el caso de la Vía de Evitamiento seguido por el Equipo Especial del Ministerio Público.
Ver: Fiscalía recibe nuevos hallazgos sobre la gestión del facilitador de Odebrecht en Tacna