Por Convoca | 4 de octubre de 2021
El Premio Nobel peruano, el escritor Mario Vargas Llosa, también figura entre los Pandora Papers. El novelista fue accionista de Melek Investing Inc, una compañía constituida en 2015, en el paraíso fiscal de las Islas Vírgenes Británicas, por OMC Group, una firma legal proveedora de servicios offshore.
Convoca accedió al formulario que Vargas Llosa llenó para adquirir la sociedad en agosto de 2015. En el documento se señaló que colocaría en Melek Investing activos por 1,1 millones de dólares generados por las regalías cobradas por la venta de sus libros. El dinero sería destinado a fondos mutuos y otros instrumentos de inversión relacionados con el mercado bursátil.
Para la adquisición de esta offshore, el novelista presentó dos cartas de recomendación ante OMC Group fechadas en julio de 2015. Una de ellas fue suscrita por Ileana H. Platt, vicepresidente de gestión de patrimonios de la entidad financiera Jefferies LLC, de Miami, Estados Unidos. En ella, da buenas referencias del escritor.
La segunda comunicación fue suscrita por la fallecida agente literaria Carmen Balcells, quien fue representante de otros cinco ganadores del Premio Nobel de Literatura y la más importante impulsora de los escritores del “boom latinoamericano”, como Gabriel García Marquez y Julio Cortázar.
“Es un cliente de mi agencia literaria de buena reputación”, escribió Balcells a un funcionario de OMC Group en Panamá. En la carta, confirmó los datos personales de su cliente, como su domicilio y su fecha de nacimiento. “Ha sido cliente mío durante 45 años”, puntualizó. Balcells falleció en 2015, dos meses después de haber firmado el documento.
El diario El País de España, en coordinación con Convoca, La Sexta y el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ), envió preguntas a la Agencia Literaria Carmen Balcells, portavoz oficial de Mario Vargas Llosa, sobre la existencia de Melek Investing Inc y sus declaraciones de impuestos.
De acuerdo con la agencia, fue la entidad financiera Jefferies, donde Mario Vargas Llosa tenía una cartera de inversiones, la que llevó estos trámites a raíz de su divorcio. “[Jefferies] debió crearle una estructura con ese nombre por razones de privacidad, pero tuvo corta duración”, explicó.
“Esa sociedad solo gestionó, durante su breve existencia, una cartera de inversiones (acciones y bonos) que ya existía desde mucho antes y que siguió existiendo a su nombre luego de liquidada”, agregó.
La sociedad fue disuelta el 20 de abril de 2017 y, según la British Virgin Islands Gazette, su hijo Álvaro Vargas Llosa fue el liquidador.
Consultada sobre las declaraciones de impuestos del novelista en Perú y en España, la agencia apuntó que mientras el Premio Nobel tuvo la compañía no era residente fiscal en ninguno de los dos países. “Cuando el Sr. Vargas Llosa se hizo residente fiscal en España, la cartera de inversión, que ya estaba a su nombre, fue declarada a las autoridades fiscales”, afirmó.
Sin embargo, las dos cartas de recomendación confirman de manera explícita que su domicilio real estaba en el distrito limeño de Barranco.
Como se sabe, en 2016, cuando estalló el escándalo global de los Panama Papers, se vinculó al escritor con una offshore también constituida en las Islas Vírgenes Británicas, en 2010, de nombre Talome Services Corp. Entonces, la negó y aseguró que se había tratado de un malentendido.
"Los Sres. Vargas Llosa nunca han mantenido cuentas bancarias en esos países, nunca han tenido relación con los abogados de Mossack Fonseca y nunca han tenido fondos ni bienes a través de una sociedad llamada así", dijo años atrás la agencia.
Para entonces, la nueva compañía Melek Investing ya existía. En ese momento, cuando era cuestionado por su actividad tributaria, ¿por qué decidió no revelar la existencia de esta otra offshore? Según la agencia literaria, como la creación de este tipo de estructuras era una práctica habitual de Jefferies, Vargas Llosa no era consciente de la titularidad de la sociedad.
No obstante, entre los documentos recibidos por OMC Group, se encuentra un consentimiento expreso de Vargas Llosa para actuar como director de su propia compañía.
Por otro lado, la Agencia Literaria Carmen Balcells señaló que no cree que haya habido otra oportunidad en la que haya firmado una carta similar para el escritor.
Muchas ficciones están hechas para publicarse, pero hay otras que solo se encuentran en el mundo offshore.