Sala Penal Nacional dejó al voto la aplicación, o no, del derecho de gracia a favor del exmandatario. Padre de una de las víctimas exige que este sea procesado por los crímenes cometidos en 1992.
Han pasado 25 años y Cesáreo Calderón Palacios no pierde las esperanzas de que se haga justicia para su hijo John, un joven de 18 años de edad que estudiaba mecánica y que fue asesinado por el grupo paramilitar Colina junto a otros cinco pobladores de Pativilca, localidad de Barranca, Lima.
Don Cesáreo, quien cumplirá 86 años el 23 de febrero próximo, fue uno de los primeros en llegar hoy a la audiencia judicial en la que se debatió si se debe aplicar el derecho de gracia otorgado al exmandatario Alberto Fujimori, por parte del presidente Pedro Pablo Kuczynski, para que no se le juzgue por el caso conocido como la matanza de Pativilca.
“Yo no estoy de acuerdo con el indulto. Quiero que haya juicio. He venido desde San Juan de Lurigancho tomando tres carros. Son 7 soles en pasajes. No he tomado desayuno, pero no importa, yo deseo que se haga la justicia legal”, expresó el padre del asesinado John Calderón al finalizar la diligencia que dejó al voto la decisión de si el expresidente Fujimori afrontará un juicio por el que podría ser condenado, tal y como la ha pedido la Fiscalía, a una pena de 25 años de prisión.
Procurador ‘express’
A pesar de que don Cesáreo escucha con dificultad, ello no fue impedimento para que advirtiera algunos episodios de la audiencia que lo dejaron ingratamente sorprendido, como la designación a última hora de un procurador ad hoc para el caso, César Romero Valdez, quien defendió la resolución de derecho de gracia presidencial que pretende beneficiar a Fujimori en el juicio.
"El reglamento de la Comisión de gracias presidenciales recomienda el derecho de gracia humanitario a los que padecen enfermedades no terminales graves que se encuentran en etapa avanzada progresiva, degenerativa e incurable… que podría conllevar a una muerte súbita. Ustedes saben que un juicio se alarga porque la persona enferma no viene al interrogatorio no podría confrontarse con otros testigos y a veces tendría que suspenderse la audiencia porque una salud está en juego”, refirió el procurador Romero Valdez.
A su turno, Gloria Cano, la abogada de los deudos de las víctimas, ya había cuestionado el delicado estado de salud de Alberto Fujimori. “El expresidente vivía en un ‘departamento’ en Barbadillo (penal) con un tópico al lado, recibía centenares de visitas, llamaba por teléfono. ¿Eso es estar grave?”.
En respuesta, el defensor legal de Fujimori, Miguel Pérez Arroyo, afirmó que lo que “quieren es verlo morir en la cárcel”.
Nunca más
Una audiencia sobre un caso que, a pesar de tener 22 procesados más, el debate se centró en si es inconstitucional o no el derecho de gracia concedido a Alberto Fujimori. “Aquí no hay ninguna irregularidad. Esta resolución ha sido llevada con todas las garantías de la ley”, argumentaba el procurador.
Pero, fue quizá un pasaje del alegato del abogado del Estado que hizo a don Cesáreo tener más presente que aún a pesar de sus años no debe claudicar en su lucha por alcanzar justicia. “No existe ninguna normatividad que señala que se tenga que poner los delitos (en la resolución que otorga el indulto y el derecho de gracia), los procesos o se tenga correr traslado a las víctimas o las víctimas pongan un médico de parte”, alegó el procurador Romero.
Don Cesáreo nos comentó al respecto: “Mi hijo era el mejor alumno, estaba por viajar a Los Ángeles para trabajar en afinamiento de motores en una empresa…lo sacaron a las 2 de la madrugada. Después lo buscamos y encontramos con dos balazos… Mi hijito si estuviera conmigo yo no andaría sin comer a veces… Recuerdo que estaba contento porque iba recoger sus papeles para irse a los Estados Unidos. Me dijo: ‘Papá te voy a mandar dólares para que te arregles tus dientes… todo de oro será tu dentadura…’. Pobrecito, mi hijo…. Yo tengo derecho a buscar justicia”.
La matanza de Pativilca es considerada uno de los crímenes más brutales del grupo Colina pues las víctimas fueron torturadas, algunas quemadas y violadas con soplete.
Cuestión de plazos
El colegiado B de la Sala Penal Nacional, presidido por Miluska Cano, dejó al voto el caso en el que tendrá que resolver, entre otros puntos, si el plazo exigido por ley para ser beneficiado con una gracia presidencial se cumple en el caso de Fujimori. Mientras su defensor legal y el procurador sostienen que exceden el plazo de 24 meses requeridos, la abogada Cano y el fiscal superior César Landa señalan que el tiempo debe contabilizarse desde la autorización en Chile para que el exgobernante sea procesado por el caso Pativilca (junio de 2017). Es decir, solo unos ocho meses.
El fiscal Landa consideró, además, indispensable que el presidente Kuczynsky explique las razones por las que otorgó el indulto y el derecho de gracia a Fujimori. César Landa coincidió con la abogada Gloria Cano en que los actos presidenciales no pueden alegarse para justificar el incumplimiento de una obligación internacional. En ese sentido, solicitó que se continúe con el proceso a Alberto Fujimori, un juzgamiento en el que el expresidente figura con comparecencia. Extrañamente, la transmisión de la sustentación del representante del Ministerio Público fue interrumpida por el canal del Poder Judicial.
“Mi hijo no era terrorista, solo era un muchacho que quería salir adelante y quería ayudarme. Al recordar tengo mucha pena. Estas dos fotos de él siempre me acompañan para recordarme que debo seguir y no desanimarme”, comentó entre sollozos don Cesáreo, quien abriga la esperanza de que el caso de su hijo no quede impune y que la lucha que aún lo mantiene en pie no haya sido en vano.