La hoja de vida de los 19 ministros del gabinete liderado por Violeta Bermúdez fueron analizadas por Convoca.pe. Se encontró que siete de ellos habían laborado en empresas que desarrollan actividades en el sector que ahora dirigen. Se trata de potenciales casos de conflicto de interés. El aplicativo fue realizado a partir de la información que los funcionarios consignan en su Declaración Jurada de Interés, donde exponen información de sus relaciones laborales y familiares.  El Estado regula que estos datos de los funcionarios se hagan públicos para advertir posibles conflictos de interés. 

Nuria del Rocío Esparch Fernández, la ministra de Defensa, es uno de los miembros del gabinete de Violeta Bermúdez que más experiencia tiene en el sector público. Sin embargo, la abogada también ha laborado en altos cargos de empresas privadas. 

Se ha desempeñado como directora en Hacer Consultores Sociedad Anónima SAC, una empresa consultora que es proveedora del Estado y prestó servicios a varios ministerios, por lo que se considera como un potencial conflicto de interés. Otros cargos que ocupó la ministra y hay que tener en cuenta son su paso por el proyecto minero La Granja, que opera Río Tinto, donde fue gerente senior de Comunicaciones, y su labor como gerenta de relaciones institucionales de la empresa Graña y Montero

Además de la ministra de Defensa, Convoca.pe detectó otros seis potenciales conflictos de interés de los ministros del presidente Francisco Sagasti. Se evaluó la Declaraciones Juradas de Interés (DJI) y otros documentos públicos, donde figura el historial laboral de los integrantes del gabinete Bermúdez. Los potenciales conflictos hallados son presentados en el aplicativo #TránsitoMinisterial.  

Es una política del Estado que los funcionarios de alto nivel presenten su DJI como una medida para transparentar y prevenir posibles conflictos de interés durante el desarrollo de su labor pública.  El Decreto Supremo N° 138-2019-PCM  da el marco legal para la presentación de las declaraciones. 

 

Se considera un potencial conflicto de interés cuando la autoridad desempeñó algún cargo en una empresa de su sector o tiene participación en empresas que pertenezcan a la cartera. Se considera que hay un conflicto de interés cuando el ministro tomó decisiones que beneficiaron a estas empresas señaladas. Solo se ha detectado potenciales conflictos. 

En el caso de la ministra de Salud, Pilar Mazzeti, se halló que, desde octubre del 2014, ostenta el cargo de gerente general en Neuropraxis S.A.C., una compañía dedicada a actividades de servicio de salud. 

Otros dos ministros que tienen empresas en el sector que dirigen son el ministro de Agricultura, Federico Tenorio Calderón, y la ministra de Vivienda, Solangel  Fernández Huanqui. Waldo  Mendoza Bellido, el nuevo titular del Ministerio de Economía y Finanzas, fue miembro del directorio de la Caja Municipal de Crédito de Lima, una institución del sector financiero.

El ministro del Ambiente, Gabriel Quijandría Acosta, ha tenido hasta 14 puestos en el Estado, relacionados con la protección del ambiente. También ha trabajado en organizaciones no gubernamentales. Del 2018 al 2019, ha trabajado como consultor independiente en el sector, por lo que se considera como un potencial conflicto de interés. 

Es una constante que en el sector Energía y Minas se presenten casos de puertas giratorias con los ministros. El actual titular del sector, Jaime Gálvez Delgado, ha trabajado en las compañías mineras Gold Fields y Antamina SA, donde desempeñó cargos gerenciales.